La polic¨ªa detiene a cinco activistas republicanos, pero no encuentra pruebas contra ellos

La investigaci¨®n del salvaje atentado del s¨¢bado deriv¨® ayer en la detenci¨®n de cinco militantes republicanos. Pero la verdadera identidad de los autores de la m¨¢s atroz masacre del conflicto en el Ulster podr¨ªa permanecer para siempre en el misterio. A esa conclusi¨®n pod¨ªa llegarse anoche horas despu¨¦s de la admisi¨®n oficial de que los cinco estaban siendo s¨®lo "interrogados" y que, como suele suceder con frecuencia en estos casos, una acusaci¨®n formal "no es inminente".

La cautela demostrada por las autoridades norirlandesas revelaba la ausencia de pruebas incriminatorias concretas contra los cinco hombres que permanecen en celdas separadas del principal centro policial de Belfast. Pero las detenciones coincidieron con una serie de contactos de funcionarios brit¨¢nicos e irlandeses para trazar una estrategia conjunta para derrotar a los grupos extremistas que han jurado destruir el proceso de paz en el Ulster. La sospecha de la matanza del s¨¢bado permanece inm¨®vil sobre el llamado IRA Aut¨¦ntico, una escici¨®n del Ej¨¦rcito Republicano Irland¨¦s (IRA) que desde hace un a?o respeta la tregua. Mo Mowlam, la ministra brit¨¢nica para Irlanda del Norte, y John O"Donoghue, ministro de Justicia de Dubl¨ªn, emergieron anoche de una reuni¨®n celebrada en Belfast con un ambiguo anuncio de renovada cooperaci¨®n policial para combatir el terrorismo. Ambos reiteraron que sus respectivos Gobiernos no van a escatimar esfuerzos para neutralizar la amenaza de los grupos como el IRA Aut¨¦ntico. Una opci¨®n que se baraja, a?adieron, es la restituci¨®n de leyes de emergencia que autorizan la detenci¨®n de sospechosos por per¨ªodos ilimitados de tiempo sin proceso legal previo.

Ninguna ha sido aprobada de momento. Londres y Dubl¨ªn est¨¢n sopesando el impacto pol¨ªtico de leyes de emergencia que en el pasado radicalizaron la postura republicana.