Un presidente muy duro
"Fenomenal, ha sido una jornada fenomenal". Y no lo jur¨® por Snoopy. El presidente del Gobierno se lo pas¨® ayer de miedo con las historias "picantes" que los pescadores de Pe?¨ªscola contaron durante la jornada que comparti¨® con ellos en alta mar. Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar abandon¨® ayer de madrugada su finca de Oropesa, camino del puerto, aunque, a decir de su indumentaria (zapatos n¨¢uticos, polo blanco con banderita, pantal¨®n corto Lacoste y gorra de p¨¢del), m¨¢s bien parec¨ªa que ten¨ªa una cita para desayunar en el club de tenis. Aznar habl¨® catal¨¢n en la intimidad, tal y como le gusta, aunque con alg¨²n lapsus. Eran las 6.45, y por los radiotransmisores de los pesqueros de Pe?¨ªscola se oy¨®: "Soy el presidente. Buenos d¨ªas. Ja podeu fer avant". Era Aznar a bordo del Hermanos Molina, un barco de pesca de arrastre, dando la orden de partida. Bueno, en realidad, Aznar dijo avante por avant. En fin, pelillos a la mar.
Dos horas despu¨¦s de la partida, apret¨® el hambre. A las 9.00, a cuatro millas de las islas Columbretes, el presidente dio la orden de almorzar: Pescadillas, pan con tomate y vino tinto. "Yo he puesto el vino y el hambre", precis¨® Aznar por radio a los periodistas, que le segu¨ªan en otro barco. Asegur¨® que estaba ayudando a soltar las redes y que hab¨ªa hablado con los pescadores de sus vidas, sus aventuras... "Pero algunas son picantes y no se pueden contar", apostill¨®. Para comer, un arr¨°s a banda cocinado en la misma embarcaci¨®n y m¨¢s vino. Tantas horas de sol y tinto propiciaron esta conversaci¨®n a las 16.15, ya en el puerto:
-Presidente, ?le han salido callos, tiene las manos duras? -le preguntaron al llegar.
-Yo lo tengo todo duro -contest¨® a lo Miguel ?ngel Rodr¨ªguez.
No sabe el presidente de los peligros de ciertas durezas. Henryk C., un polaco de 48 a?os, tuvo la ocurrencia de ponerse una arandela de acero en el pene para gastarle una broma a su pareja. Ya no se lo pudo sacar. Ni los m¨¦dicos de urgencias con sus cremas y pomadas ni los bomberos con sus equipos hidr¨¢ulicos. Al final, le tuvieron que extraer sangre para ablandar el miembro y liberarlo de su opresi¨®n.
Ajenas a tanto sufrimiento, las revistas del coraz¨®n, cuya nueva remesa lleg¨® ayer a los quioscos, siguen pendientes del desfile de epidermis al sol. El nivel de discreci¨®n textil de las portadas es variopinto, informa In¨¦s Garc¨ªa Albi. Lecturas prefiere el recatado ba?ador total para ense?arnos a Mar Flores, que veranea en C¨¢diz, o a Isabel Pantoja y su fiel amiga Mar¨ªa del Monte, que se divierten juntas en otra playa gaditana. Semana ahorra tela y opta por el biquini azul celeste de Norma Duval, mientras que Diez Minutos decidi¨® eliminar trabas y mostrar a Ana Bel¨¦n tomando el sol al natural en Menorca. ?Hola!, por variar, se decant¨® por el r¨²stico veraneo de Roc¨ªo Jurado y Ortega Cano en su finca gaditana de La Yerbabuena.
Los famosos, repantigados, y los sabios, devan¨¢ndose los sesos para hacernos la vida m¨¢s f¨¢cil. Pronto ser¨¢ m¨¢s c¨®modo jugar al bingo, gracias a un invento que permite tachar los n¨²meros con el dedo en una pantalla: el cart¨®n digital. Los ni?os japoneses disfrutan ya de un chupa-chups llamado el grito silencioso. El caramelo va incorporado a un aparatito que produce unas ondas sonoras que llegan al o¨ªdo en forma de dulce melod¨ªa a trav¨¦s de los dientes y la mand¨ªbula. El cacharro cuesta unas 2.000 pesetas.Y un ¨²ltimo invento para combatir durezas. La empresa textil francesa Rousseau ha creado la camisa el¨¢stica, harta del "encorsetamiento" que propiciaba la rigidez de pu?os y cuellos. El presidente no lo debe de saber, pero la dureza, adem¨¢s de acarrear problemas, parece que no est¨¢ de moda.
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