La CEPA cree que Entremuros seguir¨¢ contaminado para las lluvias de oto?o

El agua saturada de metales pesados que qued¨® retenida en Entremuros tras la rotura de la balsa minera de Aznalc¨®llar est¨¢ casi totalmente tratada y desembalsada al Guadalquivir. La amenaza t¨®xica ha pasado ahora a los fangos que han quedado en el fondo del cauce. La Confederaci¨®n Ecologista Pacifista de Andaluc¨ªa (CEPA) reclam¨® ayer que empiece la limpieza para evitar que las lluvias arrastren la contaminaci¨®n residual. La CEPA cree que, de todos modos, las administraciones "no llegar¨¢n a tiempo".

Los ecologistas mostraron su satisfacci¨®n con el funcionamiento de la depuradora -que ayer visitaron- instalada el pasado 10 de agosto en Entremuros. Con ella, "la depuraci¨®n ha sido id¨®nea", concedi¨® el portavoz de la CEPA, Juan Clavero quien lament¨® el retraso en su construcci¨®n: "Si se hubiera empezado en junio, el problema pod¨ªa estar ya solucionado". Clavero se?al¨®, a pie de depuradora, los fondos que quedan al descubierto tras el desembalse del agua t¨®xica, el pr¨®ximo "problema", que tendr¨¢n que afrontar las administraciones. "Ah¨ª quedan residuos contaminantes que las lluvias de oto?o arrastrar¨¢n", afirm¨®. El "problema", para los ecologistas, no s¨®lo se limita a esta zona en la que no se ha iniciado la limpieza. Seg¨²n sus c¨¢lculos, el uso de maquinaria en la retirada de los lodos ha dejado "un 10% de contaminaci¨®n en el suelo", unas 800.000 toneladas de fango con metales pesados. Cauce recuperado "En oto?o, el Guadiamar recuperar¨¢ su cauce normal", arguy¨® Clavero para pedir que las administraciones mantegan en funcionamiento la depuradora "durante a?os". Los ecologistas insistieron en que el tratamiento de parte del agua t¨®xica en una balsa pr¨®xima a la depuradora, ha sido incompleta. Seg¨²n la CEPA, la mayor parte de los metales pesados, excepto el cinc, no reaccionan al tratamiento qu¨ªmico con carbonato s¨®dico usado en la balsa por lo que se han vertido al Guadalquivir, provocando una "contaminaci¨®n silenciosa". Miembros de la CEPA tambi¨¦n tomaron muestras del agua que vert¨ªa la depuradora. Los ecologistas quieren comprobar si quedan rastros de metales pesados en las part¨ªculas en suspensi¨®n, que las anal¨ªticas oficiales no registran. Por otra parte, el Ministerio de Medio Ambiente, asegur¨® ayer haber pagado "un precio real" por los terrenos expropiados, "contrastados" con la referencia establecida por la Consejer¨ªa de Agricultura. El Ministerio rechaz¨® as¨ª la acusaci¨®n del consejero de Medio Ambiente, Jos¨¦ Luis Blanco, quien sugiri¨® el pasado martes que hab¨ªa habido prevaricaci¨®n por el pago de precios inflados.