Mariano Barroso lleva al teatro 'El hombre elefante', un s¨ªmbolo "del ¨¢ngel y el monstruo"

"Todo el mundo est¨¢ muy falto de cari?o, todo el mundo va buscando cari?o, en forma de padre, de mujer, de compa?era... Esta funci¨®n trata de unos personajes que buscan apasionadamente o bien amor o bien poder -que es lo mismo-, para conseguir amor. Creo que ¨¦se es el m¨®vil de todos los personajes". El director de cine Mariano Barroso habla de El hombre elefante, obra con la que se estrenar¨¢ en la direcci¨®n teatral a mediados de septiembre, y para la que cuenta con los actores Vicente D¨ªez, Ana Duato y Pere Ponce.

El texto, escrito por Bernard Pomerance, se present¨® en Broadway en 1979 y cuenta la historia real de John Merrick, un hombre que sufr¨ªa neurofibromatosis -una enfermedad incurable que produce deformaciones por todo el cuerpo- y que sobrevivi¨® como atracci¨®n de feria en la Inglaterra victoriana hasta que un m¨¦dico reci¨¦n licenciado se apiad¨® de ¨¦l. M¨¢s tarde, en 1980, David Lynch dirigi¨® una pel¨ªcula basada en la misma historia con la que se lanz¨® a la fama. Pero Barroso no ha querido hacer un remake de la pel¨ªcula, -"la que hay es un pelicul¨®n", explica-, y ha preferido el texto dram¨¢tico, muy distinto a la pel¨ªcula, para el que ha contado con la traducci¨®n de Juan Cavestany.Este no es el primer contacto del director de las pel¨ªculas Mi hermano del alma y ?xtasis con el teatro. Ha sido ayudante de directores de escena con William Layton, Miguel Narros, Jos¨¦ Carlos Plaza y Lluis Pasqual. En su opini¨®n, El hombre elefante es una obra de una absoluta actualidad. "Los productores me propusieron una lista de t¨ªtulos y de todos ellos no dud¨¦ en elegir El hombre elefante, porque el tema del que habla est¨¢ muy vigente. No ya al pensar sobre la xenofobia, el monstruo, el distinto, el marginal, sino en algo mucho m¨¢s b¨¢sico: que la verdad siempre est¨¢ oculta. Aqu¨ª se cuenta el descubrimiento que hace el m¨¦dico del ser humano que hay detr¨¢s de esa cara de monstruo y, un poco m¨¢s all¨¢, tambi¨¦n el descubrimiento que hace de s¨ª mismo: cada uno es una cara de la misma persona. Todos somos, a partes iguales, ¨¢ngeles y monstruos".

Y contin¨²a: "Esto, pasado a hoy, que vamos por la vida sin pararnos a pensar lo que significa que se ahoguen 38 inmigrantes en una patera, es de una absoluta vigencia. En la ¨¦poca de la imagen, en la que el aspecto exterior es lo que manda y lo que decide, en la que hay que ser bello y joven, resulta que este monstruo es un ¨¢ngel. Estuve en el hospital de Londres y all¨ª me encontr¨¦ con una mujer que padece la misma enfermedad y dec¨ªa una cosa muy impresionante: "la gente cuando me mira solamente ve una cara, pero no me ve a m¨ª". O sea, que eso de que la cara es el espejo del alma, en este caso, es una gran mentira".

Sin conciencia

"En aquella ¨¦poca a este tipo de gente los trataban como monstruos de feria. Merrick viv¨ªa como un animal, como puede vivir ahora un cerdo o una vaca... Com¨ªa basura, porque no se ten¨ªa conciencia de que fuera una persona". La reflexi¨®n de este director de 38 a?os se extiende, despu¨¦s de relatar la historia del personaje de la obra, a la vida de cualquier ser humano: "El hombre puede ser muy malo y muy ego¨ªsta. El hombre es insolidario, cobarde y ambicioso por naturaleza, porque no encuentra amor y eso le hace cruel. Cuando la gente tiene el amor de otros o de s¨ª mismo no necesita ser cruel". Una idea que se completa con el temor, otro de los temas que Barroso considera muy presente en El hombre elefante: "En la funci¨®n lo que hay es miedo a algo externo pero que representa algo interno. Es el miedo a lo desconocido, a nuestra parte monstruosa, a la parte animal que todos tenemos. Miedo a nuestro yo m¨¢s aut¨¦ntico y m¨¢s salvaje. Merrick es el yo reprimido, el que no queremos dejar que ruja, lo que uno siempre trata de reprimir o de callar".Barroso estrenar¨¢ en M¨¢laga la obra, que luego llegar¨¢ al Festival de Oto?o de Madrid. Despu¨¦s de El hombre elefante, dirigir¨¢ un largometraje, escrito tambi¨¦n por Cavestany, con los actores Javier Bardem, Ernesto Alterio, Mar¨ªa Pujalte y Jos¨¦ Sancho. El t¨ªtulo a¨²n no es definitivo pero director y autor manejan dos posibilidades: Los lobos de Washington o Las estrellas de la noche. Lo que s¨ª est¨¢ decidido es el nombre del primer largo escrito por el propio Barroso, Casbah, que despu¨¦s de un a?o de preparaci¨®n empezar¨¢ a rodar a principios del a?o que viene.