"Matrimonio por horas"
Propuesta de los conservadores iran¨ªes para dar una salida a la frustraci¨®n social de los j¨®venes
![?ngeles Espinosa](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/https%3A%2F%2Fs3.amazonaws.com%2Farc-authors%2Fprisa%2F32bb7ff4-537e-43ea-9dab-0cb3f83ba60b.png?auth=fe7906998c48e4418837148be26d16b394f20655dd6a58f57c74c79fe3150bd9&width=100&height=100&smart=true)
"Necesitamos un nuevo modelo de relaciones entre los hombres y las mujeres, entre los chicos y las chicas. Las estructuras tradicionales de relaci¨®n no son suficientes", asegura convencido Yavad Ardeshir Lariyani. La mayor¨ªa de los j¨®venes iran¨ªes est¨¢n de acuerdo con ese diagn¨®stico. Sin embargo, quien lo hace no es un miembro del campo reformista que ha llevado al poder al presidente Mohamed Jatam¨ª, sino un diputado conservador cuya propuesta de matrimonio por horas se recibe con recelo cuando no con ira.Separados a partir de los nueve a?os -edad en que las ni?as tienen que cubrirse de la cabeza a los pies-, hombres y mujeres crecen en mundos separados. Sea el chador que en la calle a¨ªsla a las mujeres de los riesgos de la libertad, sea la lona que en las playas o en las plegarias del viernes delimita las ¨¢reas en funci¨®n del sexo, siempre hay alguna tela de por medio.
"En la Universidad, a diferencia de las escuelas primarias o secundarias, las clases son mixtas", explica una profesora a la que divierte el hecho de que antes los chicos se sentaran a un lado y las chicas a otro, y ahora unas se sienten delante y los otros detr¨¢s.
El campus constituye uno de los pocos lugares de encuentro admitidos. El sistema de valores imperante espera que ambos sexos vivan en mundos separados hasta el matrimonio. Para verse los j¨®venes se buscan la vida. "Al volver un d¨ªa a casa, me di cuenta de que ten¨ªa un papel en el bolsillo del guardapolvo. Era el n¨²mero de tel¨¦fono del chico con el que hab¨ªa coincidido en el taxi. No s¨¦ c¨®mo lo hizo, pero ni me enter¨¦", comenta Hamide, una joven universitaria.
Colgados del tel¨¦fono
"S¨ª, aqu¨ª en general son las chicas las que llaman a los chicos", explica una madre que acaba de descubrir decenas de papelitos con el n¨²mero de tel¨¦fono de su casa en la chaqueta de su hijo de 16 a?os. Y se pasan el d¨ªa colgados del tel¨¦fono. "?Qu¨¦ otra cosa pueden hacer si no hay discotecas, los cines s¨®lo proyectan pesti?os y en los parques est¨¢n constantemente bajo el escrutinio de los guardianes de la moral?", a?ade esta mujer, que se esfuerza por que sus chavales crezcan sin demasiados complejos. Pero la naturaleza es la naturaleza. Lo reconoce el propio Lariyani en su conversaci¨®n con EL PA?S: "No somos santos, aqu¨ª tambi¨¦n hay adulterio". Por eso propone que, en lugar de ignorar los hechos, se regulen. Su plan consiste en que, junto al matrimonio habitual, se generalice una forma de matrimonio temporal admitida por el islam shi¨ª y denominada shigu¨¦. De hecho, esta modalidad, practicada s¨®lo de forma ocasional en Ir¨¢n, ha aumentado en los ¨²ltimos a?os ante las dificultades que presupone una boda, inalcanzable para muchos j¨®venes por los gastos que implica.El diputado teheran¨ª va incluso m¨¢s lejos. Admite abiertamente que eso abrir¨ªa la puerta a una forma de prostituci¨®n, al aceptar que el contrato pueda durar s¨®lo una o dos horas y la mujer reciba una compensaci¨®n por ello. La sociedad ser¨¢ m¨¢s sana, manifiesta. La promoci¨®n de estas f¨®rmulas previstas por la ley isl¨¢mica ha sido defendida por una autoridad religiosa, el ayatol¨¢ Haeri Chirazi, que dirige la oraci¨®n en Chirad.
Tanto los intelectuales como la izquierda isl¨¢mica discrepan de esta propuesta que ven como un atentado contra la dignidad de la mujer. Pero es sobre todo desde el campo femenido de donde llegan m¨¢s objeciones. En un pa¨ªs en el que el n¨²mero de licenciadas universitarias iguala al de licenciados, las mujeres no parecen entusiasmadas con la propuesta. "?Qu¨¦ futuro le espera despu¨¦s a una chica que haya aceptado un matrimonio temporal?", se pregunta S., una joven empleada de 24 a?os que mantiene una relaci¨®n fuera de las convenciones isl¨¢micas y sin el conocimiento de su familia. "Incluso si encuentra a un chico que no le importe, la mayor¨ªa de las familias exigen un certificado de virginidad antes de la boda".
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