"Los que violan la soberan¨ªa son los 'narcos"

El embajador de EEUU en Panam¨¢, Willian J. Hughes, rompe lanzas en defensa del Centro Multilateral Antinarc¨®ticos (CMA). Es una propuesta paname?a, asegura, y su ejecuci¨®n no vulnera los Tratados Torrijos-Carter, ya que operar¨ªa desde instalaciones que a partir del 2000 ser¨¢n paname?as. "La soberan¨ªa paname?a se viola a diario, pero no por parte de Estados Unidos. Los narcotraficantes violan el espacio a¨¦reo, mar¨ªtimo y las fronteras de Panam¨¢, ignoran sus leyes. Para aquellos que se preocupan de la soberan¨ªa de Panam¨¢, su seguridad y su cultura, el CMA deber¨ªa tener buena acogida". El diplom¨¢tico insta a no perder de vista que las millonarias inversiones requeridas fomentar¨¢n el empleo y el comercio, y el centro de ninguna manera ser¨ªa una base militar porque ninguna de las dispuestas por EEUU en el mundo tiene una junta directiva civil multinacional, seg¨²n establece el documento de constituci¨®n, ni sus funciones son combatir el narcotr¨¢fico. "Si hubi¨¦ramos querido una base la hubi¨¦ramos negociado como lo hemos hecho con decenas de naciones".

Objetivos del CMA

El CMA, sobre el papel, tendr¨¢ un mando civil, adiestrar¨¢ personal latinoamericano en la detecci¨®n de alijos, y la m¨¢xima autoridad recaer¨¢ sobre el Consejo de Ministros de Relaciones Exteriores. Una de las ventajas observadas por M¨¦xico es que el CMA podr¨¢ identificar vuelos irregulares procedentes del sur antes de su ingreso en territorio nacional, rumbo a EEUU casi todos, por lo que tendr¨¢ tiempo para interceptarlos. "M¨¦xico vendr¨ªa a ser una especie de escudo ¨¢reo. Esta enorme barrera protectora desde Panam¨¢ a M¨¦xico", apunta el analista Agust¨ªn Gutierrez, "coincide con la estrategia norteamericana de mantener la lucha contra el narcotr¨¢fico fuera de sus fronteras y no dentro".De todas formas el centro deber¨¢ aplicar tecnolog¨ªa punta porque, hasta ahora, los equipos instalados en la base Howard son insuficientes. Un informe del Comando Sur reconoc¨ªa que los progresos de la lucha contra el tr¨¢fico de estupefacientes era relativa desde esas instalaciones porque el 70% de la droga comercializada en EEUU entra por mar en contenedores herm¨¦ticamente cerrados, confundida con la mercancia legal, a trav¨¦s de compa?¨ªas navieras con toda la documentaci¨®n en regla. "Miles de contenedores pasan por nuestras barbas cuando atraviesan el canal con sus respectivos sellos inviolables", agrega el general Dar¨ªo Paredes, que comunic¨® sus preocupaciones a los jefes de Estado y de Gobierno del Grupo de R¨ªo, que agrupa a 14 pa¨ªses latinoamericanos y que celebr¨® a principios de mes su duod¨¦cima cumbre en Ciudad de Panam¨¤.

En cinco a?os los narcotraficantes lograron penetrar las l¨ªneas navieras con significativo ¨¦xito, de tal suerte que el concepto de barcos y aviones sospechosos que era el campo especializado del CMA ya no existe.