El teatro vence a la lluvia
El viernes hizo fr¨ªo en T¨¤rrega, se levant¨® el viento y el cielo amenaz¨® tormenta, pero s¨®lo acab¨® cayendo una llovizna fina e intermitente que no lleg¨® a amendrentar al p¨²blico ni a los artistas (s¨®lo suspendi¨® Gog y Magog). Eso s¨ª, hubo que recurrir al paraguas y a la ropa de abrigo. Se vieron sandalias con calcetines; hubo quien tuvo que comprarse una chaqueta para pasar el trago de mantenerse firme al aire de la noche, y las cafeter¨ªas sirvieron de refugio. Los grupos que hasta el viernes hab¨ªan agotado entradas son Pablo Carbonell, Alexis Vald¨¦s, Toni Alb¨¤, Malvolio, Grappa Teatre, Espejo Negro, Pocaconya, B¨²bulus, Doctor Soler, Centre de Titelles de Lleida y A Santa Companya. Por su parte, el c¨¢mping hab¨ªa superado sus previsiones y sumaba la noche del viernes hasta 8.500 campistas en 3.300 tiendas o caravanas. Entre los platos fuertes de la Fira de T¨¤rrega, que desde hace dos ediciones tiene entre sus objetivos principales -con la figura de Carles Santos como emblema, que despu¨¦s del ¨¦xito de La pantera imperial ha regresado este a?o con el montaje L"espl¨¨ndida vergonya del fet mal fet- acercarse a la contemporaneidad est¨¦tica, se encontraba la compa?¨ªa canadiense PPS Danse con su espect¨¢culo P?les, que tiene como principal atractivo el uso de im¨¢genes virtuales tridimensionales con las que los bailarines interact¨²an. La magia de PPS Danse se agota, sin embargo, en el uso de los artilugios visuales, y P?les no pasa de ser una coreograf¨ªa discreta. Con todo, el uso de escenograf¨ªas lum¨ªnicas y la incorporaci¨®n de personajes inmateriales abre las puertas a un teatro futuro que, si no se pierde en el hedonismo de los efectos visuales, puede ser fascinante. Efectos como el fuego o el agua alcanzan una realismo imposible de conseguir con otros medios. Pero T¨¤rrega es teatro de calle y, desgraciadamente, el viernes ya resultaba imposible acercarse a los espect¨¢culos callejeros por el exceso de p¨²blico. Por su condici¨®n de acr¨®bata, la Fura pudo verse sobre la densa multitud de cabezas que poblaban la plaza Major. Colgada de una gr¨²a, con m¨²sica de misticismo oriental, la Fura ascendi¨® por dos lienzos de un rojo intenso para ejecutar sus acrobacias. Un peque?o espect¨¢culo que es de una belleza coreogr¨¢fica inusual y que se cuenta entre las peque?as joyas de esta feria. M¨¢s coreograf¨ªas, pero esta vez firmemente asentadas sobre el suelo, fueron las de Andr¨¦s Corchero y de B¨²bulus. Andr¨¦s Corchero, que sigue desarrollando su estilo basado en la t¨¦cnica japonesa de danza butho, present¨® con ?s lu que ni¨¤, uno de sus mejores solos, compartido esta vez con el pianista Agust¨ª Fern¨¢ndez, que us¨® el piano, como hace habitualmente, como un instrumento total, repiqueteando sobre sus maderas, golpeando las cuerdas con las manos o interpretando m¨²sica mel¨®dica desde el teclado. La danza contrahecha de Corchero ofrec¨ªa un hermos¨ªsimo contraste con la belleza escult¨®rica y el sonido del piano. Corchero, que tuvo que suspender su primera actuaci¨®n por problemas con la organizaci¨®n, pudo por fin presentar su trabajo. B¨²bulus present¨® su espect¨¢culo 7, con algunas im¨¢genes de ascendencia pop afortunadas, con la inclusi¨®n de Superman y la Princesa L¨ªa entre sus personajes, as¨ª como ¨¢ngeles y secretarias desbordadas, pero lastrado por unos textos po¨¦ticos rimbombantes y una exposici¨®n dramat¨²rgica poco coherente. El descubrimiento del d¨ªa fue la protagonista de El joc de l"amor i de l"atzar, de la compa?¨ªa Malvolio. En un espect¨¢culo de enredos de una frescura infrecuente, la joven actriz Gavina Sastre hizo alarde de una naturalidad y una inteligencia esc¨¦nica, matizando silencios, tonos, intenciones, muy superiores a las habituales. El espect¨¢culo, dirigido por Pep Anton G¨®mez e interpretado por un buen equipo de actores, entre ellos Mariona Anglada, Jaume Grau, Francesc Torrent y Llu¨ªs X. Villanueva, actualiza la obra de Marivaux acerc¨¢ndola, en ritmo y actitudes, con el a?adido de m¨²sica de jazz, a la comedia americana.
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