Los problemas econ¨®micos obligan a reducir plantilla a las grandes cadenas generalistas de Estados Unidos

Una progresiva p¨¦rdida de audiencia y la reducci¨®n de ingresos publicitarios que ello supone, unido al alza constante de precios en el mercado de derechos deportivos y cinematogr¨¢ficos ha provocado que las grandes cadenas generalistas estadounidenses se decanten por una pol¨ªtica de cinturones apretados. Los primeros recortes apuntan a la plantilla.La NBC ha remitido a sus empleados un informe en el que est¨¢n obligados a justificar en qu¨¦ consiste exactamente su trabajo. La ABC est¨¢ intentando cortar cabezas de forma gradual. La CBS no va a la zaga. Ya ha solicitado a varios analistas financieros planes concretos para enfrentarse a una reducci¨®n de gastos. El presidente de esta ¨²ltima cadena, Mel Karmazin, ha dicho que cuenta con un fondo de 70 millones de d¨®lares (alrededor de 10.500 millones de pesetas) para cubrir indemnizaciones. Los observadores atribuyen esta pol¨ªtica de recorte de gastos a las colosales inversiones realizadas la pasada temporada en la compra de derechos para remontar los niveles de audiencia. As¨ª por ejemplo, la CBS invirti¨® 4.000 millones de d¨®lares (600.000 millones de pesetas) en la retransmisi¨®n de la Liga de F¨²tbol Americano.

Para prolongar las emisiones de su serie estrella -Urgencias- durante tres temporadas m¨¢s, la NBC invirti¨® 850 millones de d¨®lares (127.000 millones de pesetas). Las facturas de la ABC tambi¨¦n fueron considerables: pag¨® 32 millones de d¨®lares (casi 5.000 millones de pesetas) al humorista Tim Allen por su participaci¨®n en la serie Un chapuzas en casa.

Ciertamente, tanto el f¨²tbol americano como Urgencias han sido rentables en t¨¦rminos de audiencia, pero su coste es demasiado elevado. Adem¨¢s, las cuentas de resultados de las cadenas se agravan tambi¨¦n por las innumerables series compradas que jam¨¢s se han llegado a emitir; y por la contrataci¨®n de estrellas que luego se encuentran sin guiones adecuados.

Servicios comunes

Fruto de esta pol¨ªtica de recortes, algunas major se plantean nuevas v¨ªas. Caso de la CBS, que mantiene negociaciones para fusionar o coordinar sus servicios informativos con los de la CNN para, entre otras cosas, ahorrar costes.Los conversaciones se remontan al pasado a?o, cuando Richard Parsons y Mel Karmazin, altos cargos de Time Warner y CBS, respectivamente, estudiaron diversas f¨®rmulas de colaboraci¨®n entre ambas compa?¨ªas. Las conversaciones no culminaron por falta de acuerdo al decidir qui¨¦n controlar¨ªa la gesti¨®n.

Sin embargo, en los ¨²ltimos tiempos ha renacido el inter¨¦s y ejecutivos de las dos compa?¨ªas aseguran que las negociaciones est¨¢n avanzadas. Se?al de que corren tiempos dif¨ªciles para las grandes cadenas, castigadas por la audiencia tras multiplicarse la oferta audiovisual y que soportan un caro mercado de derechos.