La presi¨®n ecologista logra que la firma Spumatex de Crevillent depure residuos

La empresa de calzado Spumatex de Crevillent, en el Baix Vinalop¨®, era desde hace una d¨¦cada, cuando entr¨® en funcionamiento, uno de los puntos negros de vertidos t¨®xicos, lo que motiv¨® m¨²ltiples manifestaciones de los principales grupos ecologistas. Desde ayer, Spumatex dispone de una depuradora para garantizar que las aguas que evac¨²a en una rambla est¨¢n libres de productos t¨®xicos. Esta instalaci¨®n se ha construido tras el acuerdo alcanzado entre la empresa y el Ayuntamiento de Crevillent, que permitir¨¢ a Spumatex legalizar su situaci¨®n y construir un pol¨ªgono industrial. Spumatex es una empresa que realiza gomas y vulcanizados para el calzado. El proceso de fabricaci¨®n implica la utilizaci¨®n de muchos aditivos t¨®xicos que contaminaban las aguas que vert¨ªa la industria. Ahora, tras una inversi¨®n de 25 millones, la empresa depura sus l¨ªquidos mediante un proceso que separa los aditivos del agua. El alcalde de Crevillent, C¨¦sar Augusto Asencio, del PP, acus¨® ayer a la anterior corporaci¨®n socialista de consolidar con su gesti¨®n las infracciones de Spumatex. La empresa, adem¨¢s de contaminar, no dispon¨ªa de licencia para desarrollar su actividad y estaba construida en terrenos calificados como suelo r¨²stico. "Hace a?os, el Ayuntamiento le impuso una multa de 6 millones de pesetas, pero la desidia de los anteriores gobernantes hizo que prescribiera sin cobrarla", a?adi¨® Asencio. Tras el acuerdo con la empresa, el Ayuntamiento ha recalificado como suelo industrial una superficie de 90.220 metros cuadrados que hasta ahora eran r¨²sticos. Esta parcela es propiedad de Spumatex y de la empresa Dacca, y ambas podr¨¢n regularizar su situaci¨®n. El nuevo pol¨ªgono tendr¨¢ m¨¢s de 60.000 metros cuadrados para implantar f¨¢bricas, y el resto se dedicar¨¢ a viarios y zonas verdes.