Mendizorroza se abri¨® s¨®lo a los socios
Despu¨¦s de 42 a?os, Mendizorroza volvi¨® ayer a ser un campo de Primera Divisi¨®n. O al menos, la parte de Mendizorroza que est¨¢ construida. Porque, como en el Villamar¨ªn, la reforma no se ha terminado.El Alav¨¦s, desplazado a San Mam¨¦s en la primera jornada, volvi¨® al fin a su casa. Aunque con molestias. La grada principal est¨¢ a medio hacer, de hecho carece de techumbre, y quienes pagan el abono m¨¢s caro se calentaron el cogote con el sol de la tarde. Entre ellos, el presidente alavesista, Gonzalo Ant¨®n, que como su colega Lopera en el Betis, se sent¨® entre el p¨²blico porque todav¨ªa no existe el palco.
Eso s¨ª, Mendizorroza se convirti¨® en una especie de club privado. Las taquillas se cerraron y s¨®lo pudieron acceder los 14.000 abonados del Alav¨¦s porque no se supo a ciencia cierta el aforo exacto del estadio hasta cinco horas antes del partido. Cosas de la improvisaci¨®n.
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