M¨¢s de lo mismo

Con la presentaci¨®n de los presupuestos comienza una nueva campa?a de explicaciones y contraexplicaciones sobre lo que van a suponer para los andaluces. Hay tres contenciosos de la Junta con el Estado y sus presupuestos: el reconocimiento de la poblaci¨®n real andaluza, las aportaciones en compensaci¨®n de la "deuda hist¨®rica" (de las que s¨®lo se recibieron los 20.000 millones firmados con el ¨²ltimo gobierno socialista) y la infradotaci¨®n de inversiones que viene sufriendo la comunidad desde la llegada al Gobierno del PP. Para estos tres contenciosos, los nuevos presupuestos parecen aportar pocas novedades. Siguen sin reconocerse los habitantes reales de Andaluc¨ªa, lo que induce a pensar que de nuevo se presentar¨¢n recursos ante el Tribunal Constitucional; no se han comunicado nuevas compensaciones por la deuda hist¨®rica y, finalmente, el presupuesto de inversiones reproduce similares defectos a los de a?os precedentes: se prometen inversiones seg¨²n el denominado sistema alem¨¢n, que no aparecen, no ya como carga presupuestaria, sino incluso como obra ejecutada; en Andaluc¨ªa se vuelven a concentrar los gastos en inversiones militares (el 25%, 27.000 millones); no se respetan los planes plurianuales de inversiones establecidos por el gobierno anterior; y las obras emblem¨¢ticas en infraestructura o se remiten al sistema alem¨¢n o se les aplica una cantidad rid¨ªcula en relaci¨®n al coste efectivo. En concreto, en lo relativo a estas obras emblem¨¢ticas es muy llamativa la dotaci¨®n presupuestaria de 3.000 millones, cuando la inversi¨®n prevista es de 230.000 millones. En realidad, parece estar imponi¨¦ndose el criterio de que el AVE a M¨¢laga no se incorporar¨¢ a los programas europeos antes del 2000. Y con ello se cierne la duda sobre las cabezas de los andaluces, porque muy probablemente para esa fecha, y despu¨¦s de haber bajado el IRPF, a los europeos les va a quedar pocas ganas de pagar nuestras inversiones.