El PSE modifica su programa sobre pacificaci¨®n para rechazar expresamente el Acuerdo de Lizarra

Los socialistas vascos han modificado el apartado de pacificaci¨®n de su programa electoral para introducir un rechazo expreso a la Declaraci¨®n de Lizarra. El PSE cree que esta "propuesta nacionalista rompe con el sistema pol¨ªtico" actual y es una amenaza para el progreso econ¨®mico vasco. Para el PSE, la alternativa pol¨ªtica que emana de este texto es un "retroceso en la historia, un espejismo para el futuro", abre un periodo de incertidumbres y supone "un riesgo serio de ruptura territorial y social". "El sistema pol¨ªtico no puede ser moneda de cambio con los terroristas", dicen.

Ya nadie duda de que la Declaraci¨®n de Lizarra y, sobre todo, la tregua de ETA han trastocado la agenda electoral de los partidos vascos. En esa readecuaci¨®n a toda prisa de discursos y de programas electorales, los socialistas no se han querido quedar atr¨¢s. Y para hacer honor al lema elegido para esta campa?a electoral -Las cosas claras- han incluido en su compromiso con los electores un rechazo expreso al Acuerdo de Lizarra, que aboga por un di¨¢logo sin condiciones ni exclusiones y en el que la ¨²ltima palabra soberana la tengan los vascos. "?se no es el camino para resolver los problemas pol¨ªticos de la sociedad vasca", replican los socialistas. El PSE considera que ese documento rompe con el actual sistema pol¨ªtico dise?ado en la Constituci¨®n y en el Estatuto de Gernika y abre un "horizonte de incertidumbre, un riesgo serio de ruptura territorial y social en el Pa¨ªs Vasco". Frente a la defensa de los derechos colectivos y nacionales que refleja el documento firmado en Estella, los socialistas subrayan que "no hay derechos colectivos o de nacionalidad por encima de las personas, ni proyecto pol¨ªtico alguno que pueda prosperar en democracia sacrificando los derechos de las personas o su libertad". El programa socialista tambi¨¦n es meridianamente claro en lo que respecta a los efectos de la tregua etarra. Junto a la defensa de unos operativos policiales eficaces y de una "justicia diligente" -ya que sin ellos "nunca habr¨¢ paz"-, los socialistas reiteran que de la tregua no puede surgir ning¨²n trueque con contenidos pol¨ªticos. Como ya recog¨ªa su anterior programa, el PSE reitera que "el sistema pol¨ªtico no puede ser tampoco moneda de cambio con los terroristas y violentos. En democracia, el sistema pol¨ªtico lo determinan los ciudadanos con su voto en las urnas". Los socialistas reconocen que la tregua anunciada por ETA el pasado 16 de septiembre, "pese a no ser un cese definitivo de su actividad terrorista", abre "expectativas de un final pr¨®ximo y definitivo de la violencia y el terrorismo". El PSE reitera su defensa de la firmeza democr¨¢tica y apunta los pasos a seguir tras el cese de las actividades armadas: "El proceso que tenemos que abrir a partir del anuncio de tregua no puede tener otro final que la disoluci¨®n de ETA y la democratizaci¨®n de HB para defender sus propuestas pol¨ªticas por procedimientos democr¨¢ticos y someterlas al veredicto de las urnas". Los socialistas han excluido del programa la cita por la que se planteaba la "imposibilidad de cooperar pol¨ªticamente con HB" mientras no condene el terrorismo. Y, calcando la idea de consolidaci¨®n de la tregua expresada por el presidente del Gobierno, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, en sus dos declaraciones institucionales y recogida tambi¨¦n en el Pacto de Ajuria Enea, dicen que si el alto el fuego "se consolida con muestras inequ¨ªvocas de que cesa la violencia" hay que aplicar el "final dialogado" fijado en el punto 10 de Ajuria Enea. Pero llegados a este punto, los socialistas reiteran que en ese final dialogado no cabe abordar asuntos pol¨ªticos: "Las cuestiones pol¨ªticas deben tratarse entre los partidos que representan la voluntad popular y resolverse por procedimientos democr¨¢ticos sin la presi¨®n de ninguna amenaza violenta".