Armi?¨¢n mezcla humor, amor y misterio en "Siete pesadillas"

"A la novela lo que le faltan son lectores", asegur¨® ayer Jaime de Armi?¨¢n (Madrid, 1927) en la presentaci¨®n de Siete pesadillas (Espasa), su tercera novela. El escritor, guionista y director de cine y de televisi¨®n respond¨ªa as¨ª a la afirmaci¨®n realizada previamente por Adolfo Marsillach durante la presentaci¨®n de la obra. Como lector, Marsillach encuentra que algunas de las novelas de nuestros coet¨¢neos consideran el argumento "como un lastre del que hay que desprenderse para potenciar el estilo". No es el caso, dijo Marsillach, de Siete pesadillas, una novela en la que "confluye una dualidad muy rica: est¨¢ bien escrita y ocurren cosas".

Como amigo ¨ªntimo del autor -"no sacar conclusiones er¨®ticas"-, Marsillach concluy¨® que ese af¨¢n por potenciar el hilo argumental tiene mucho que ver con el hecho de que Armi?¨¢n pertenezca al mundo del espect¨¢culo donde impera un alto sentido del ritmo y de la acci¨®n y "eso vale lo mismo para el cine, el teatro, un gui¨®n o una novela". Nuevamente tom¨® la palabra el autor de Siete pesadillas para aclarar que en todo argumento tienen que ocurrir cosas: "La primera obligaci¨®n de un autor es procurar no aburrir al cliente". El ritmo, en opini¨®n de Armi?¨¢n, no consiste en correr ni en embarullarse y decir muchas cosas. "He procurado que la novela tenga un ritmo y que los personajes hablen, para ello he puesto especial cuidado en la utilizaci¨®n del lenguaje".

Trauma de infancia

Siete pesadillas cuenta la historia de un prestigioso notario madrile?o, traumatizado en la infancia por las humillaciones infringidas por un amigo con el que vuelve a encontrarse al paso de los a?os. En la cita entre ambos personajes el amigo es asesinado. Como en sus dos novelas anteriores, Armi?¨¢n mezcla en esta novela intriga, amor, misterio y humor.En la presentaci¨®n, a la que acudi¨® tambi¨¦n la actriz M¨®nica Randall, se habl¨® m¨¢s de la amistad entre los tres que del libro. Los tres forman parte de la generaci¨®n que fue fundamental en la televisi¨®n de los a?os sesenta. Armi?¨¢n, que es autor de series como Las 12 caras de Eva, Galer¨ªa de Maridos y Confidencias, no quiso entrar en an¨¢lisis sobre la televisi¨®n que se hace ahora donde los grandes temas parecen ser los concursos. "La televisi¨®n de antes era en blanco y negro que es mucho m¨¢s bonito", dijo. "Entonces se mezclaban el trabajo, la ilusi¨®n y el talento, y ahora mandan, sobre todo, el dinero y la chapuza".

No es partidario Armi?¨¢n de las adaptaciones de novelas. "El cine debe nutrirse de sus propios argumentos", dijo. Armi?¨¢n desaconsej¨® que sean los propios autores los que se encarguen de adaptar sus obras, dado que "est¨¢n demasiado encadenados al producto". Neg¨® tambi¨¦n el autor de Juncal que Madrid sea su ciudad fetiche. Es la ciudad en la que ha nacido y la que mejor conoce: "Si fuera catal¨¢n escribir¨ªa de Barcelona. Hay que escribir de lo que uno conoce".