Un juzgado investiga el enriquecimiento de los ediles de Marbella

Un juez de Marbella investiga el patrimonio del ex alcalde accidental marbell¨ª Pedro Rom¨¢n y de todo su equipo de Gobierno en relaci¨®n con una recalificaci¨®n urban¨ªstica presuntamente ilegal, seg¨²n fuentes pr¨®ximas a las pesquisas de Hacienda. La investigaci¨®n patrimonial, que busca aflorar sobornos, tambi¨¦n podr¨ªa afectar al propio alcalde, Jes¨²s Gil, si prospera un recurso de la fiscal¨ªa contra su sobreseimiento en el caso del edificio Belmonsa.

El Gobierno municipal de Marbella afronta algo peor que su mayor crisis pol¨ªtica tras la reciente dimisi¨®n del que desde 1991 fue su alcalde de facto, Pedro Rom¨¢n Zurdo. ?l y no el alcalde oficial, Jes¨²s Gil, firm¨® los 400 convenios urban¨ªsticos que dinamit¨® la Junta de Andaluc¨ªa al suspender su planeamiento general. Y ¨¦l, no Gil, responde con riesgo de prisi¨®n ante los juzgados por el casi centenar de denuncias urban¨ªsticas. Gil deseaba seguir concediendo licencias de obra a¨²n despu¨¦s de que la Junta le dej¨® sin base legal. Rom¨¢n sab¨ªa que deber¨ªa firmarlas al precio de multiplicar sus citas judiciales. Y ha optado por dedicarse a su densa agenda empresarial.Rom¨¢n sali¨® del Ayuntamiento "m¨¢s rico que entr¨®, pero sin robar", seg¨²n Gil. A la justicia le interesa tal enriquecimiento, del que Hacienda no tiene fiel noticia. El titular del juzgado n¨²mero 7 de Marbella, Santiago Torres, investiga el patrimonio real del ex alcalde accidental marbell¨ª y de todo su equipo de Gobierno en relaci¨®n con una operaci¨®n inmobiliaria (el edificio Belmonsa) recientemente suspendida por este magistrado "en atenci¨®n a los indicios criminales", seg¨²n fuentes relacionadas con las pesquisas solicitadas a Hacienda. El fiscal ha recurrido el sobreseimiento de Gil, que no firm¨® el expediente, y esto abre la puerta a que el juez y Hacienda escudri?en tambi¨¦n su riqueza.

Rom¨¢n, al margen de la investigaci¨®n encargada por el juez a Hacienda, es objeto de un expediente abierto por la Agencia Tributaria el pasado junio, seg¨²n fuentes relacionadas con estas pesquisas, que eval¨²an en 400 millones su deuda con Hacienda. Tal inspecci¨®n se abri¨® por la delegaci¨®n de Hacienda en Marbella al constatar que Rom¨¢n se jactaba en p¨²blico de ser due?o de la inmobiliaria Sierra Blanca, propietaria de una urbanizaci¨®n valorada en m¨¢s de 2.000 millones. Los funcionarios de Hacienda comprobaron con sorpresa que el lugarteniente de Gil declaraba por todo ingreso sus sueldos como miembro de la corporaci¨®n, de la mancomunidad y de la diputaci¨®n provincial. Pese a su fama de empresario urban¨ªstico, no citaba un solo ingreso procedente de acciones de sociedades ni declaraba poseer fincas. Igual sorpresa tuvo el juez al investigar el patrimonio de Rom¨¢n y de su equipo de Gobierno. Todos declaran s¨®lo sus sueldos como cargos locales. Pero el registro mercantil lo desmiente. Rom¨¢n es due?o de dos inmobiliarias al margen de su confesada propiedad de Sierra Blanca.

Y no es el ¨²nico miembro del equipo de Gobierno marbell¨ª que ha mostrado cierta amnesia fiscal, seg¨²n fuentes relacionadas con las pesquisas de Hacienda. El registro mercantil retrata como administradores de distintas empresas a varios concejales que oficialmente viven de su retribuci¨®n p¨²blica. Sobre estas sociedades y dem¨¢s patrimonio no aflorado se centra ahora la doble lupa del juez y de Hacienda. El magistrado intenta descubrir signos de enriquecimiento injustificado en el patrimonio de los miembros del equipo de Gobierno para rastrear presuntas comisiones a cambio de la recalificaci¨®n urban¨ªstica del terreno donde se asienta el edificio Belmonsa que, seg¨²n auto judicial, ocup¨® "576 metros cuadrados que anteriormente constitu¨ªan parte de una plaza y jardines levantados por la corporaci¨®n" y una calle. El juez, que aleg¨® al ser consultado no poder informar por el secreto sumarial, investiga si pisos de Belmonsa han sido usados como pago encubierto a los ediles.