El barco que caus¨® 20 muertos en Banyoles estaba casi indocumentado

La embarcaci¨®n L"oca, cuyo naufragio en el lago de Banyoles caus¨® la muerte de 20 jubilados franceses el pasado jueves, no hab¨ªa completado la mayor¨ªa de los tr¨¢mites que se exigen a una embarcaci¨®n comercial. El Ayuntamiento de Banyoles fue declarado ayer responsable civil subsidiario por el juzgado n¨²mero 7 de Girona. El consistorio deber¨¢ asumir las consecuencias econ¨®micas del siniestro si la compa?¨ªa de seguros de los dos acusados, Bartomeu Gayol¨¤ y Sim¨® Rodr¨ªguez, y sus bienes no cubrieran el total de las indemnizaciones.

El alcalde de Banyoles, Joan Solana, efectu¨® ayer por la ma?ana su primera declaraci¨®n ante la juez Montserrat Bastit, quien hab¨ªa acusado al Ayuntamiento de injerencia en las investigaciones por haber encargado un informe t¨¦cnico sobre las causas del suceso. El informe municipal descubri¨® las manipulaciones que hab¨ªa sufrido el barco, las cuales, junto a la enorme sobrecarga, provocaron su hundimiento. Solana defendi¨® ayer ante la magistrada la correcci¨®n de la actuaci¨®n municipal en el asunto y aleg¨® que estaban destinadas a esclarecer las irregularidades administrativas que hubieran podido producirse. De momento, la decisi¨®n judicial de declarar responsable civil subsidiario al Ayuntamiento impide que ¨¦ste pueda presentarse en la causa como acusaci¨®n particular, como era su pretensi¨®n. El alcalde asegur¨® que est¨¢ dispuesto a dimitir si las evidencias de la investigaci¨®n judicial demuestran que existi¨® una negligencia municipal que no pueda asumir ning¨²n miembro de su consistorio. Pero inmediatamente a?adi¨® que el municipio no tiene ninguna responsabilidad relacionada con la botadura y la navegabilidad del marco. El alcalde explic¨® que el consistorio dio su autorizaci¨®n a la embarcaci¨®n, en febrero de 1997, bas¨¢ndose en un informe de un ingeniero naval que ¨²nicamente certific¨® que L"oca funcionaba con tracci¨®n el¨¦ctrica y ten¨ªa capacidad para 80 plazas. Y sostuvo que, desde ese momento, toda la responsabilidad por negligencias respecto al catamar¨¢n eran competencia de la Direcci¨®n General de la Marina Mercante, dependiente del Ministerio de Fomento. Ni siquiera ten¨ªa matr¨ªcula Solana asegura que la burda manipulaci¨®n del casco de la nave, causa principal del hundimiento, deb¨ªa haber sido advertida por la Marina Mercante. La subdelegaci¨®n del Gobierno en Girona confirm¨® ayer que el catamar¨¢n siniestrado no hab¨ªa completado la mayor¨ªa de los tr¨¢mites para poner en funcionamiento una embarcaci¨®n comercial. Adem¨¢s del certificado de navegabilidad, faltaban los certificados del equipo de seguridad, del n¨²mero m¨¢ximo de pasajeros y tripulantes y del material n¨¢utico. El barco no ten¨ªa ni siquiera una matr¨ªcula provisional, paso indispensable para inscribirlo en el registro de buques de la provincia y completar as¨ª todos los tr¨¢mites exigidos legalmente. La mayor¨ªa de estos documentos deb¨ªa ser solicitada por el armador y el propietario. Durante m¨¢s de tres meses el barco tur¨ªstico oper¨® en el lago de Banyoles transportando un buen n¨²mero de pasajeros sin que la Administraci¨®n local ni el Ministerio de Fomento pidiera cuentas a los propietarios sobre las flagrantes transgresiones de su situaci¨®n legal y sin que nadie advirtiera las fatales modificaciones realizadas en el barco. Entre ¨¦stas se halla la apertura de unas rejillas de ventilaci¨®n en la parte trasera de la nave por las que el agua entr¨® a borbotones el d¨ªa de la tragedia al haber permitido que subieran a bordo 140 pasajeros y doblar as¨ª pr¨¢cticamente el pasaje recomendado.PASA A LA P?GINA 4