Se cumpli¨®

Circunstancias previas. Las circunstancias previas que rodeaban a este partido han tenido una incidencia directa en el juego del mismo. Desde el inicio se observ¨® el estado de ansiedad de los jugadores espa?oles. Exist¨ªa un exceso de responsabilidad, sobre todo en los jugadores debutantes, como Alkiza, Engonga, Aranz¨¢bal o De Pedro.Jugadores complementarios. El binomio en ataque Ra¨²l-Kiko cuando aparece es letal. Ambos tienen capacidad para definir. Hicieron buenas combinaciones pero me quedo con dos asistencias de Ra¨²l a Kiko, donde el gaditano en la primera err¨® en la ejecuci¨®n, y en la segunda no acert¨® en la toma de decisi¨®n, optando por el pase y no por el disparo.

La direcci¨®n y conducci¨®n. La direcci¨®n del equipo espa?ol responsabiliza a Engonga y Alkiza. Durante el primer tiempo ambos pasaron desapercibidos. La raz¨®n s¨®lo hay que buscarla en que sus rivales en esas posiciones, Berkovich y Nimny tuvieron una destacada actuaci¨®n.

Cambio de iniciativa. Radical cambio de iniciativa en la segunda parte. Las razones fundamentales fueron el aumento de ritmo desarrollado por el equipo espa?ol. La presi¨®n era con m¨¢s fe, y la reducci¨®n de espacios se hac¨ªa de forma m¨¢s sincronizada, y todo ello provoc¨® la constante posesi¨®n del esf¨¦rico.

Hierro. Con su gol equilibr¨® un partido en el momento m¨¢s oportuno. Cuando mejor jugaba el equipo espa?ol lleg¨® el gol israel¨ª. Despu¨¦s, su potente disparo ayudado por la colaboraci¨®n del portero Cohen, equilibr¨® el resultado y a partir de ah¨ª el estado an¨ªmico del equipo espa?ol resurgi¨®, para acabar imponi¨¦ndose definitivamente.

El acierto de Camacho. La obligaci¨®n de ganar del equipo espa?ol la materializ¨® Etxeberria, pero el seleccionador estuvo totalmente acertado al incorporar a Luis Enrique en la banda izquierda, para dar entrada a Etxeberr¨ªa en la derecha. Ambos protagonizaron la victoria de la selecci¨®n espa?ola.