El Papa reclama el auxilio de la filosof¨ªa para "legitimar" la fe

La filosof¨ªa debe abrirse a la especulaci¨®n metaf¨ªsica, porque la raz¨®n es capaz de alcanzar, dentro de "las limitaciones de la naturaleza humana", las verdades fundamentales de la existencia: la espiritualidad e inmortalidad del alma, la capacidad de hacer el bien y de seguir la ley moral natural o la afirmaci¨®n de la libertad humana. ?ste es el mensaje esencial de la enc¨ªclica papal Fides et ratio (Fe y raz¨®n).

Fides et ratio, decimotercera enc¨ªclica de Juan Pablo II, fue presentada en El Vaticano ayer, la v¨ªspera de la celebraci¨®n hoy del 20? aniversario de su elecci¨®n como Papa. La enc¨ªclica es fruto de 12 a?os de trabajos de una comisi¨®n de te¨®logos y fil¨®sofos, dirigida por el Pont¨ªfice, que ha redactado personalmente las 150 p¨¢ginas del texto. Fides et ratio tiende una mano a la raz¨®n, a la filosof¨ªa, y reconoce su contribuci¨®n al progreso humano y al enriquecimiento de la fe, pero no renuncia a dictarle a la raz¨®n las condiciones imprescindibles sobre las que debe basarse la nueva armon¨ªa entre los dos adversarios hist¨®ricos. Condiciones que presuponen, en cierto modo, la aceptaci¨®n por parte de la raz¨®n de las verdades de la revelaci¨®n cristiana.

Las palabras de presentaci¨®n a cargo del cardenal Joseph Ratzinger, prefecto de la Congregaci¨®n para la Doctrina de la Fe, fueron elocuentes al respecto. "La universalidad del cristianismo procede de su pretensi¨®n de ser la verdad, y desaparece si desaparece la convicci¨®n de que la fe es la verdad. Pero la verdad es v¨¢lida para todos y el cristianismo es v¨¢lido para todos porque es verdadero. Si la raz¨®n desea conocer la verdad, el anuncio cristiano hace un llamamiento a esta apertura de la raz¨®n para entrar en el coraz¨®n del hombre. Por ello no puede existir ninguna contraposici¨®n, ni separaci¨®n, ni extra?eza entre la fe cristiana y la raz¨®n humana, porque ambas, pese a las diferencias que las distinguen, est¨¢n unidas en la verdad".

De ah¨ª, se?al¨® Ratzinger, que la fe cristiana est¨¦ obligada a oponerse a aquellas filosof¨ªas o teor¨ªas "que excluyen la aptitud del hombre para conocer la verdad metaf¨ªsica de las cosas (positivismo, materialismo, cientifismo, historicismo, problematicismo, relativismo y nihilismo)". Es decir, las principales corrientes de pensamiento del siglo que termina.