Sin pilas y con imaginaci¨®n
Los ni?os de los a?os 50 jugaban a cacharritos; con mu?ecas de cart¨®n piedra con sempiternos ojos de sobresalto y rompecabezas que reconstru¨ªan una Europa actualmente desgajada. Despu¨¦s fueron llegando los mu?ecos "de carne", los camiones de pl¨¢stico y las arquitecturas desmontables de cientos de piezas. Todos sin pilas. Los ni?os de entonces, como los de ahora, abandonaban los juguetes a la velocidad del rayo en alg¨²n rinc¨®n. La mayor¨ªa de las veces terminaban en la basura. A veces las madres se resist¨ªan y los guardaban amorosamente en el fondo de un armario. De esos armarios los ha rescatado, d¨¦cadas despu¨¦s, la asociaci¨®n vasca para la ecolog¨ªa social Rezikleta y otras organizaciones de corte similar de Espa?a. "Queremos dar vida a todos esos juguetes, recuperar la memoria hist¨®rica y demostrar que la basura tambi¨¦n puede tener un valor cultural y sentimental", explican Elena Manzarbeitia y Josetxu Gonz¨¢lez, de Rezikleta. La Casa Torre de Ariz de Basauri, construida en el siglo XII, acoge desde ayer y hastael pr¨°ximo d¨ªa 29, una exposici¨®n itinerante de juguetes de otros tiempos. Los m¨¢s antiguos datan de los a?os 20 y los m¨¢s recientes, de los sesenta. Est¨¢n ordenados por temas y ¨¦pocas, y, aunnquelos organizadores no han contado el n¨²mero, son suficientes para incitar a los m¨¢s peque?os a su contemplaci¨®n y a los mayores, a montarse en el t¨²nel del tiempo . "Cuando yo era peque?a, en mi casa hab¨ªa un oso que se mov¨ªa cuando le disparabas, parecido a ¨¦ste, y yo no soy tan mayor", cuenta Elena Manzarbeitia, de 32 a?os. El oso de la exposici¨®n emergi¨® del caj¨®n de los juguetes desechados algo maltrecho, pero vivo. "Excitante juego cazador de osos", se lee en la caja descolorida por el tiempo que loha protegido. A su lado, un rifle "como usted ha visto en la televisi¨®n", reza la publicidad que le acompa?a. La imaginaci¨®n infantil podr¨¢ volar hasta las im¨¢genes de Parque Jur¨¢sico. As¨ª de primitivo les parecer¨¢ el juguete. Rezikleta ha enviado a los colegios una invitaci¨®n para que los ni?os acudan. "Nos gustar¨ªa que, adem¨¢s de ver los juguetes que proceden de la recogida domiciliaria por Espa?a, se conciencien sobre el reciclaje de basuras. Por eso, durante el tiempo de la exposici¨®n, ofrecemos tambi¨¦n la posibilidad de participar en el taller Jugando con la basura. Consiste en la recreaci¨®n de juguetes a partir de materiales de la basura. Los escolares jugar¨¢n con hueveras, envases de yogur, telas viejas, cartones de leche... para a volverlas a la vida", explican los portavoces de Rezikleta. Los ni?os de Bilbao tendr¨¢n posibilidad de sorprenderse con los juguetes en la primera quincena de diciembre, en el Centro C¨ªvico de la Bolsa, donde se expondr¨¢ la colecci¨®n. Mientras, el colectivo ecologista seguir¨¢ recogiendo muebles, enseres, ropas, papel, latas y casi cualquier cosa de las que acaban en la basura. En 1997, lograron 268.080 kilos de muebles y enseres voluminosos en la comunidad vasca, de los que recuperaron un 60%. En ocho a?os de existencia, Rezikleta cuenta con dos locales y pronto abrir¨¢ un tercero. En la exhibici¨®n de juguetes antiguos, los caballitos y elefantes de cart¨®n, los coches descapotables, las m¨¢quinas fotogr¨¢fica de miniatura, el zootropo [antiguo sistema de proyecci¨®n de los a?os 20] y una mu?eca "de ojos articulados", de los 50, esperan impert¨¦rritos la presencia de los visitantes.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.