Micr¨®fonos que graban a un kil¨®metro

"F¨ªjate si te gusta [el Pa¨ªs Vasco] que est¨¢s en el monte con Arzalluz". Felipe Gonz¨¢lez hizo, el 13 de octubre, este comentario a Jordi Pujol ignorando que estaba siendo grabado por los micr¨®fonos direccionales de televisiones privadas.El desmoronamiento de la Uni¨®n Sovi¨¦tica supuso que la Administraci¨®n norteamericana dedicase menos esfuerzos al espionaje militar y se disparase, en cambio, el desarrollo de tecnolog¨ªas con aplicaciones policiales y aduaneras. As¨ª lo se?ala el informe Evaluaci¨®n de las tecnolog¨ªas de control pol¨ªtico encargado por el Parlamento Europeo a la consultora brit¨¢nica Omega Foundation.

Los micr¨®fonos que grabaron a Gonz¨¢lez y Pujol son de juguete comparados con los que utilizan algunos servicios de seguridad. Los micr¨®fonos parab¨®licos graban conversaciones hasta a un kil¨®metro de distancia si los interlocutores se sit¨²an en el campo de visi¨®n. Si se combinan con un l¨¢ser pueden registrar una conversaci¨®n a trav¨¦s de una ventana cerrada siempre y cuando carezca de cortina, los colocutores no golpeen la mesa con los nudillos, la humedad ambiental sea escasa, etc¨¦tera.

Las c¨¢maras, equipadas con potentes zooms y con intensificadores de luz, han dado tambi¨¦n un salto tecnol¨®gico de gigante. La danesa Jai, que est¨¢ ya en el mercado, puede fotografiar en segundos y de forma individual a todos los participantes en una manifestaci¨®n o en una marcha.

Las que fueron empleadas en la plaza pequinesa de Tiannamen eran menos sofisticadas, pero dieron buen resultado a las autoridades chinas en 1989 cuando los estudiantes se concentraron all¨ª para pedir la democratizaci¨®n de China.

"El sistema de vigilancia Scoot, con c¨¢maras Pelco fabricadas en EE UU, se utiliz¨® para grabar fielmente las protestas", se?ala el informe de la Euroc¨¢mara. "Las im¨¢genes se emitieron repetidamente por la televisi¨®n china, ofreciendo una recompensa por la informaci¨®n, y, gracias a ella, se logr¨® identificar a casi todos los transgresores" de la ley. Cabe preguntarse por qu¨¦ hay ahora c¨¢maras de control de tr¨¢fico en la capital de Tibet, donde la circulaci¨®n no es a¨²n intensa.