Los ni?os saharauis no perdieron nada

El festival era a beneficio de los ni?os saharauis, pero ni hab¨ªa ni?os ni mayores de esa comunidad. No hab¨ªa, siquiera, un comit¨¦ organizador al que los toreros pudieran brindar sus toros. No hab¨ªa homenajeados, pero la verdad es que no se perdieron nada, porque el espect¨¢culo brill¨® por la ausencia de toreo bueno y de toros bravos. En fin, un aburrimiento en una ma?ana oto?al -el festival comenz¨® a las doce del mediod¨ªa- bajo un sol de justicia. Ojal¨¢ que, al menos, se haya obtenido alg¨²n beneficio econ¨®mico para quienes lo necesitan.Debutaban dos matadores de toros en el ruedo maestrante: Vicente Salamanca, organizador del festejo, y Emilio Silvera. El primero, colombiano pero afincado en Sevilla, ha actuado siempre como sobresaliente, y se encontr¨® con la oportunidad de su vida que, como era l¨®gico, no pudo aprovechar. Silvera tampoco tuvo suerte: el empresario sevillano, Diodoro Canorea, convalece en un hospital de una dolencia card¨ªaca y no pudo comprobar la garra y el deseo de triunfo de este bravo torero onubense que no torea en Sevilla porque no tiene padrino.

Salamanca se mostr¨® voluntarioso, pero su novillo qued¨® quebrantado en el encuentro con el caballo, al que derrib¨® espectacularmente, y no fue un fiel colaborador. Despu¨¦s de una faena insulsa dio la vuelta al ruedo y pase¨® agradecido dos ramos de flores y luci¨® con orgullo una mancha de sangre de toro en el pantal¨®n. Silvera, por su parte, sab¨ªa lo que se jugaba y luch¨® con garra contra un novillo violento. No pudo ser y alguien le contar¨¢ al empresario una historia que le salve del compromiso para la pr¨®xima feria.

Actuaban tambi¨¦n dos veteranos, Jos¨¦ Luis Parada y Jos¨¦ Antonio Campuzano. El primero se encontr¨® con un novillo noble y repetidor y lo desaprovech¨®; el segundo, con un manso huidizo, busc¨® las palmas a base de un toreo para la galer¨ªa.

Parada demostr¨® su sabor torero en unas buenas ver¨®nicas y los primeros compases con la muleta, pero ah¨ª acab¨® todo. Abus¨® del pico y prefiri¨® el toreo r¨¢pido y superficial. Campuzano s¨®lo destac¨® en un buen quite por ver¨®nicas y en la estocada final.

Antonio Manuel Punta torea poco y se le nota mucho. La casta de su novillo lo desbord¨®, y se mostr¨® nervioso, atolondrado y con poco mando. Una buena estocada le proporcion¨® una oreja. Domingo Valderrama, que hac¨ªa su quinto pase¨ªllo este a?o en la Maestranza, se entreg¨® de verdad en las ver¨®nicas de salida, y levant¨® al p¨²blico de sus asientos al comenzar rodilla en tierra la faena de muleta. El novillo era violento, el torero no se acopl¨® y todo qued¨® en una decepci¨®n. Al final tres orejas y dos vueltas al ruedo, cinco premios inmerecidos, pero todo sea por el bien de los ni?os saharahuis.

Ocho orejas

Ocho orejas totaliz¨® la terna en la corrida de toros que se celebr¨® ayer en Villacarrillo (Ja¨¦n) con menos de media entrada, y los tres salieron a hombros, informa Efe. Se lidiaron toros de Jandilla, flojos, manejables. Rafael Gasta?eta, ovaci¨®n y petici¨®n de oreja; dos orejas. Sebasti¨¢n C¨®rdoba, dos orejas y silencio. David Gil, dos orejas y oreja.?beda (Ja¨¦n). ?ltimo festejo de la temporada organizado en homenaje a la mujer onubense, celebrado el s¨¢bado con menos de un cuarto de entrada.

Se lidiaron toros de Luis Ram¨ªrez, bien presentados, de los que dos dieron juego y dos resultaron dif¨ªciles. Paco Senda, oreja; ovaci¨®n y saludos. Sebasti¨¢n C¨®rdoba, dos orejas; dos avisos y palmas. El rejoneador Mart¨ªn Gonz¨¢lez, con un toro aplomado, cort¨® una oreja.