Poder¨ªo, refinamiento y bullanguer¨ªa

En la corrida celebrada el pasado domingo en Guadalajara se vieron tres formas diferentes de interpretar el toreo. La de Miguel Espinosa Armillita fue de poder¨ªo, la de Juli¨¢n L¨®pez El Juli de bullanguer¨ªa y la de Guillermo Capetillo de refinamiento.Inexplicablemente, Miguel Armillita no pudo acoplarse a la suave embestida del segundo toro de la tarde y su toreo no tuvo ligaz¨®n. Pero con el quinto, un toro bravo llamado Meta Cumplida con extraordinario tranco que mereci¨® la vuelta al ruedo en el arrastre, cre¨® una obra de arte al cuajar una faena estructurada con dominio y torerismo que quedar¨¢ grabada en la memoria de los asistentes.

Exponiendo mucho y camin¨¢ndole con tersos pases de la firma y trincherazos, lo llev¨® a los medios y ah¨ª lig¨® esculturales series de redondos y naturales abrochados con cristalinos cambios de mano. Hac¨ªa mucho tiempo que no se ve¨ªa al diestro de Aguascalientes torear con tanta entrega y decisi¨®n.

Con los palitroques

Con el fijo toro tercero, aplaudido en el arrastre, El Juli se luci¨® con el percal pero lo m¨¢s sobresaliente fue su destreza con los palitroques.Su muleteo fue muy variado pero empa?¨® su labor con los 17 descabellos que necesit¨® para despachar a la res brava.

Con el sexto, que fue el lunar del encierro pues adem¨¢s de incierto estaba reparado de la vista, El Juli luch¨® para que tomara los enga?os pero se top¨® con la mansedumbre del animal.

Para sacarse la espina, el joven espada madrile?o regal¨® el sobrero, un ejemplar anovillado pero que por su alegr¨ªa result¨® adecuado para su forma de torear.

Se volvi¨® a lucir con el capote y puso a la plaza de pie con su prodigiosa t¨¦cnica para banderillear en los terrenos de adentro d¨¢ndole ventaja al burel.

Para ganar m¨¢s aplausos, el madrile?o brind¨® la muerte del corn¨²peta a sus dos alternantes, Miguel Armillita y Guillermo Capetillo. Sus estatuarios, derechazos, naturales y afarolados invertidos los ejecut¨® El Juli para la galer¨ªa y ¨¦sta le premi¨® con el trofeo.

Carteles de post¨ªn

Guillermo Capetillo no pudo dominar al gazap¨®n astado que abri¨® el festejoSu actuaci¨®n con el cuarto toro, sin embargo, fue el reverso de la medalla. El ritual y el sabor con que realiz¨® cada lance y cada pase podr¨ªan servir para carteles de ferias de post¨ªn.

Las ver¨®nicas de Guillermo Capetillo fueron aterciopeladas y en sus series de naturales barri¨® la arena con la franela llevando templado al noble adversario con un embrujante ritmo. Pero el p¨²blico, acostumbrado al toreo de relumbr¨®n, no s¨®lo no lo apreci¨® sino que lo ignor¨® por completo.

El problema del artista Guillermo Capetillo es que por su hosca personalidad no llega a los tendidos.