Borrell tacha los Presupuestos de mentirosos y Rato le llama irresponsable "casi desleal"

El gran rito democr¨¢tico y parlamentario anual, en el que la oposici¨®n pide que se devuelva al Gobierno el proyecto de Presupuestos, digan lo que digan, gobierne quien gobierne y sea quien sea el que se oponga, se ofici¨® ayer con contenidos mucho m¨¢s brillantes de los que hac¨ªa prever la pobre expectaci¨®n que hab¨ªa despertado. Jos¨¦ Borrell, candidato del PSOE a la presidencia del Gobierno, tach¨® el proyecto de cuentas del Estado para 1999 como "contemplativo con la crisis", mentiroso con las cifras y ocultador de d¨¦ficit. El vicepresidente econ¨®mico, Rodrigo Rato, acus¨® a Borrell de comportarse con una "irresponsabilidad casi desleal". El PNV dio la sorpresa anunciando que retira su apoyo al Ejecutivo.

"Si quieren nuestro apoyo tendr¨¢n que gan¨¢rselo", espet¨® el portavoz del PNV Jon Zabal¨ªa, quien ayer anunci¨® que hoy no votar¨¢n con el Gobierno contra las enmiendas que piden la devoluci¨®n de las cuentas p¨²blicas para 1999.Rato consumi¨® hora y media en cantar las alabanzas a la situaci¨®n econ¨®mica y las bondades de su proyecto y Borrell lleg¨® a la tribuna, con tono moderado, para plantear una acusaci¨®n general de tancredismo ante la crisis internacional y tratar de llevar el debate a problemas que afectan al d¨ªa a d¨ªa de los ciudadanos: "Dicen que la inversi¨®n p¨²blica sube, pero en realidad cae respecto a la de este a?o; que se refuerza el presupuesto educativo, pero no dicen que es en beneficio de los centros privados; que se incrementa la inversi¨®n en I+D, pero gracias a que incluyen en ella, de forma indebida, la compra de material militar; que van a abrir muchos hospitales, cuando este a?o s¨®lo han ejecutado el 25% de las inversiones en sanidad". Luego asegur¨® que tambi¨¦n se rebajan las becas de estudio y que la Seguridad Social no est¨¢ haciendo el acopio de reservas que exigen los Pactos de Toledo para garantizar el sistema a diez o 15 a?os vista.

Por la tarde, aunque en otra sinton¨ªa muy distinta, el portavoz de Conv¨¨rgencia i Uni¨°, Joaquim Molins, dej¨® claro que apoyar¨¢ al Gobierno en este tr¨¢mite, pero expres¨® su preocupaci¨®n por "qu¨¦ pasar¨¢ en el futuro" en alusi¨®n a la crisis financiera internacional.

Borrell estuvo t¨¦cnico, como es inevitable en un debate presupuestario, pero sin utilizar t¨¦rminos demasiado complejos y lanz¨® alg¨²n golpe a su adversario, al decirle que su discurso de presentaci¨®n hab¨ªa sido "pl¨²mbeo de contenido y casi castrista por su extensi¨®n".

Rato no ha sido nunca una paloma parlamentaria, pero ayer s¨®lo actu¨® como halc¨®n. Le dijo a Borrell, en todos los tonos posibles, que no sab¨ªa de qu¨¦ hablaba, que sus asesores le hab¨ªan confundido y quiso acorralarle con preguntas sobre sus alternativas a la pol¨ªtica del Gobierno. En otros momentos adopt¨® un tono paternalista para ofrecer explicaciones pero con andanadas que quer¨ªan ser demoledoras: "?Por qu¨¦ me lo pone tan f¨¢cil?", lleg¨® a decirle.

Borrell hab¨ªa hecho hincapi¨¦ en que el Gobierno est¨¢ pagando con deuda gastos corrientes y resumi¨® as¨ª la pol¨ªtica presupuestaria: "Un ciclo econ¨®mico favorable, liquidaci¨®n del patrimonio p¨²blico empresarial, incremento de la presi¨®n fiscal global y de la indirecta, desv¨ªo de gastos financieros, que no computan como d¨¦ficit, traslado hacia el pasado de gastos en curso y hacia el futuro de obligaciones ciertas y seguras". Para Borrell "el milagroso control del gasto consiste simplemente en dejar de apuntarlo en el lugar y el momento adecuado".

Despu¨¦s, el portavoz socialista lanz¨® cr¨ªticas muy duras a la financiaci¨®n sanitaria, con los pactos auton¨®micos en esta materia, y a la financiaci¨®n auton¨®mica en general para detenerse en la Seguridad Social y acusar al Gobierno de no garantizar el futuro de las pensiones. Frente a la afirmaci¨®n de Rato de que las listas de espera en la sanidad p¨²blica se hab¨ªan reducido de un a?o a 83 d¨ªas, Borrell le acus¨® de mentir con su propaganda y el ministro le contest¨® que no se hab¨ªa le¨ªdo bien los Presupuestos.

Estos extremos irritaron especialmente a Rato, que en su respuesta le asegur¨® que Andaluc¨ªa perder¨¢ 51.000 millones de pesetas por no haberse acogido al pacto, mientras Castilla-La Mancha y Extremadura dejar¨¢n de recibir m¨¢s de tres mil millones. "Es que no hay derecho", dijo el ministro casi ofendido y subi¨® el tono para acusar a Borrell de volver a un discurso "catastrofista": "No hay derecho a meter miedo a los ciudadanos".

Borrell, en contra de la fama que atesor¨® mientras fue ministro, no regres¨® a la tribuna con modos altitronantes, sino que, calmado, le reproch¨® a Rato que se hubiera deslizado por la descalificaci¨®n y su supuesta ignorancia. Termin¨® caballeroso y retador: "Le supongo muy listo.. Dispone de mucha capacidad e informaci¨®n. ?sela y conteste". Seg¨²n los socialistas, el vicepresidente no lo hizo en ning¨²n momento.