El Guggenheim expone la fusi¨®n de lo industrial y lo org¨¢nico en la escultura de Cristina Iglesias

El Museo Guggenheim de Bilbao inaugurar¨¢ el 6 de noviembre la exposici¨®n de obras recientes de la escultora donostiarra Cristina Iglesias, que ser¨¢ la primera que la pinacoteca dedica al arte vasco y espa?ol. La muestra est¨¢ compuesta por una veintena de obras, en la que su autora trabaja con materiales industriales como el hormig¨®n, el hierro y el vidrio y formas org¨¢nicas inspiradas en el mundo vegetal. La comisaria de la exposici¨®n, Carmen Gim¨¦nez, destaca que en el museo de Bilbao el montaje se adec¨²a especialmente "al espacio arquitect¨®nico que la alberga".

El Guggenheim ha dedicado con anterioridad en Bilbao una exposici¨®n monogr¨¢fica a la artista norteamericana Helen Frankenthaler, una pintora encuadrada en la segunda generaci¨®n de expresionistas abstractos neoyorquinos. Estas muestras, de car¨¢cter m¨¢s especializado y centradas en per¨ªodos cronol¨®gicos breves, tienen un papel complementario de las exposiciones de gran envergadura, como China: 5.000 a?os o la pr¨®xima que dedicar¨¢ a la totalidad de la trayectoria art¨ªstica de Robert Rauscheberg. Desde el 6 de noviembre al 14 de febrero de 1999, el Guggenheim reunir¨¢ en una exposici¨®n una veintena de las creaciones recientes de Iglesias. La muestra abrir¨¢ una serie dedicada a investigar el arte contempor¨¢neo que se est¨¢ generando en el entorno m¨¢s cercano del museo y permitir¨¢ profundizar en el trabajo de artistas vascos y espa?oles. Cristina Iglesias (San Sebasti¨¢n, 1956) vive actualmente en Madrid. Su creciente proyecci¨®n profesional le ha llevado a destacar entre los creadores europeos m¨¢s j¨®venes. En palabras de la comisaria de la exposici¨®n, Carmen Gim¨¦nez, conservadora de arte del siglo XX en los museos Guggenheim, la escultora donostiarra "forma parte de una generaci¨®n emergente de importantes artistas contempor¨¢neos que trabajan hoy en Espa?a". El periplo de la muestra de Cristina Iglesias comenz¨® el verano de 1997 en el Museo Guggenheim de Nueva York. Posteriormente fue mostrada en la Renaissance Society, de Chicago, y en el Palacio de Vel¨¢zquez, de Madrid. Gim¨¦nez, una acreditada profesional que particip¨® en la gestaci¨®n del Museo Reina Sof¨ªa y en el dise?o de su programa de exposiciones, y que es directora del proyecto de creaci¨®n de la Fundaci¨®n Museo Picasso de M¨¢laga, cree que las caracter¨ªsticas de la obra de Iglesias destacar¨¢n en el marco arquitect¨®nico del Guggenheim de Bilbao. A la utilizaci¨®n de materiales como el hormig¨®n, el hierro y el vidrio, la artista suma motivos vegetales inspirados en el bamb¨² y la hojarasca, que logran fundir lo industrial y lo org¨¢nico. A menudo la superficie de sus obras est¨¢ cubierta con patrones de follaje. El gran formato y las variadas composiciones de sus esculturas generan un di¨¢logo, que sugiere al espectador que transite alrededor de las piezas o, incluso, pase a trav¨¦s de ellas. En su obra es recurrente la exploraci¨®n de un espacio dentro de otro. Por ejemplo, recrea un bosque de bamb¨² a trav¨¦s de un mecanismo de repetici¨®n de un motivo y la artista invita a entrar en un recinto que redefine el espacio de la sala de exposici¨®n. La muestra pondr¨¢ de manifiesto el inter¨¦s de Cristina Iglesias por destacar los problemas de forma y espacio, en concreto al hacer referencia a patrones y texturas que aparecen en la naturaleza. El resultado es la invenci¨®n de su propio paisaje escult¨®rico. Serigraf¨ªas de gran formato Las instalaciones de Iglesias van acompa?adas de serigraf¨ªas fotogr¨¢ficas de gran formato sobre lienzo, seda o cobre. Aunque parecen estar impresas a partir de fotograf¨ªas de instalaciones al aire libre, representan en realidad modelos en miniatura de las obras de la artista. Junto a las esculturas, estas piezas crean una ilusi¨®n de profundidad espacial y desdibujan a¨²n m¨¢s la distinci¨®n entre el entorno natural y el espacio construido. Iglesias comenz¨® a exponer su obra en los a?os 80. Desde entonces ha participado en m¨¢s de 60 exposiciones individuales y colectivas en Europa, Estados Unidos y Jap¨®n. Entre ellas, destaca su presencia en el pabell¨®n espa?ol de las bienales de Venecia de 1986 y 1993, y en instituciones art¨ªsticas como la Kunsthalle, en la ciudad suiza de Berna, y el Stedelijk van Abbe Museum de Eindoven (Holanda). Es, adem¨¢s, profesora de la Akademie der Bildenden K¨¹nste, en Munich.