Detenido un joven de 16 a?os por violar en Huelva a una mujer de 89

Un menor de 16 a?os de edad, que responde a las iniciales T.N., fue detenido a las 13.00 horas de ayer por efectivos de la Guardia Civil de Lepe (Huelva), acusado de violar a una anciana de 89 a?os de edad la tarde del s¨¢bado en una vivienda de la calle Oller¨ªa de la localidad onubense.Fuentes de la investigaci¨®n indicaron que T.N. atrajo hasta su domicilio a la v¨ªctima con enga?os, ya que ¨¦sta utilizaba el tel¨¦fono de la abuela del presunto violador para recibir llamadas y cuando los dos se encontraban solos en la vivienda se produjo, presuntamente, el asalto sexual.

Las mismas fuentes no supieron precisar si se lleg¨® a consumar la violaci¨®n, aunque la mujer se ha recuperado f¨ªsicamente y se encuentra en su domicilio, pero se teme por las secuelas ps¨ªquicas que le puedan quedar tras estos hechos.

El presunto violador ya fue detenido en el verano de 1996, cuando contaba 14 a?os de edad, acusado de violar a un ni?o de cuatro a?os. Entonces fue confinado en un centro de acogida de menores de Sevilla, aunque la familia del ni?o violado pidi¨® que se le detuviese indefinidamente para evitar otro ataque similar.

T.N. se encuentra custodiado por la Guardia Civil de Lepe, en cuyo cuartel pasar¨¢ la noche, y est¨¢ previsto que hoy por la ma?ana sea puesto a disposici¨®n del juzgado de primera instancia de Ayamonte (Huelva).

El menor podr¨ªa recibir atenci¨®n psiqui¨¢trica en alg¨²n centro de menores aparte de ser confinado, ya que al no ser mayor de edad todav¨ªa no puede ser encarcelado.

Por otra parte, la Audiencia de Tarragona ha condenado a siete a?os de prisi¨®n a Baltasar Fuentes S¨¢nchez, de 19 a?os, conocido como el violador de la careta, por haber agredido sexualmente a una menor, de 16 a?os, en una f¨¢brica abandonada en septiembre de 1997.

Seg¨²n relata la sentencia dos vecinos pudieron auxiliar a la joven cuando sali¨® de la f¨¢brica, aunque no pudieron identificar la cara del agresor ya que llevaba una careta que representaba la cara de un anciano.