Las instituciones lanzan un plan para atajar los delitos en Azca
Los bajos de Orense quedar¨¢n pronto al descubierto. La Delegaci¨®n del Gobierno y el Ayuntamiento de Madrid han decidido poner fin a la rampante inseguridad que se mueve a los pies de los rascacielos de Azca (Tetu¨¢n) y han acordado un plan de choque que, adem¨¢s de la creaci¨®n de una minicomisar¨ªa en la zona, incluye por primera vez una amplia reforma urban¨ªstica como medida contra la delincuencia. Esta obra se centrar¨¢ en el mayor punto negro de la zona: los bajos de la calle de Orense.
El objetivo de la medida, seg¨²n ambas instituciones, consiste en cambiar la distribuci¨®n de los bajos de tal modo que la luz entre en este laberinto subterr¨¢neo, lleno de garitos nocturnos. En esta l¨ªnea de espantar el delito, el plan de choque tambi¨¦n incluye ampliar aceras, colocar bolardos y farolas e incluso abrir gran parte de los bajos al tr¨¢fico. "Es una zona muy violenta. Junto a las molestias que ocasionan a los vecinos los locales de copas, est¨¢ la propia configuraci¨®n urban¨ªstica de los bajos, con esquinas y pasadizos oscuros que se han convertido en feudo de ciertas bandas violentas y armadas. La mejora pasa por acabar con la estructura urban¨ªstica que da cobijo a esta delincuencia", se?al¨® la concejal de Tetu¨¢n, Beatriz Elorriaga, del PP. PASA A LA P?GINA 3
La polic¨ªa abrir¨¢ una dependencia para 50 agentes en los mismos bajos de Orense
VIENE DE LA P?GINA 1Esta reforma estructural en los bajos de Orense tendr¨¢ que ser visada por la Gerencia Municipal de Urbanismo. Los detalles del proyecto, con todo, han sido dejados en principio en manos de la asociaci¨®n de comerciantes (Conazca) que gestionaba el mantenimiento de esta zona, calificada como suelo privado de uso p¨²blico. Una concesi¨®n que acaba de vencer despu¨¦s de 20 a?os de vigencia y que empresarios y vecinos, seg¨²n fuentes municipales, pretenden prorrogar.
Este grupo ser¨¢ el que presente el proyecto urban¨ªstico al Ayuntamiento para su aprobaci¨®n definitiva. La directrices generales de la reforma, sin embargo, ya se acordaron el pasado viernes en una reuni¨®n en la que participaron, adem¨¢s de los comerciantes, el delegado del Gobierno, Pedro N¨²?ez Morgades, la concejal de Tetu¨¢n, el jefe de la Polic¨ªa Municipal, el comisario del distrito y dos altos representantes de la Jefatura Superior de Polic¨ªa.
Junto a los cambios estructurales, la Delegaci¨®n del Gobierno ofreci¨® abrir en el mismo coraz¨®n de los bajos de Orense, en un local que anta?o ya tuvo un uso policial, una oficina de denuncias.
A este bajo se destinar¨ªan 50 agentes y servir¨ªa de base operativa tanto a los grupos de prevenci¨®n de la delincuencia del distrito como a la polic¨ªa de barrio. El ¨²nico escollo para la apertura de esta minicomisar¨ªa reside en que al tratarse de un local privado, la Administraci¨®n no puede por ley correr con los gastos de reforma (6.100.000 pesetas). "Si la asociaci¨®n de vecinos y comerciantes costea la rehabilitaci¨®n, este mismo a?o podr¨ªamos trasladar all¨ª a los efectivos", se?al¨® el delegado del Gobierno, Pedro N¨²?ez Morgades.
En tanto que los vecinos deciden la cesi¨®n del local, los jefes policiales acordaron aumentar el n¨²mero de patrullas que peinen la zona as¨ª como de sus efectivos. Par reforzar este frente, La Polic¨ªa Municipal se comprometi¨® a incrementar sus controles de alcoholemia y las visitas de sus temidas gr¨²as por la zona, sin olvidar la multiplicaci¨®n de sus patrullas uniformadas. La concejal de Tetu¨¢n complet¨® los elementos que conformar¨¢n este cerco policial con la inclusi¨®n de un aumento de la presi¨®n administrativa hacia los garitos nocturos y afterhours (aquellos que cierran ya entrada la ma?ana). Su idea, que ya ha sido puesta en pr¨¢ctica y ha conducido a la clausura de dos establecimientos, consiste inspeccionar todos estos locales e imponer un cumplimiento estricto de los horarios nocturnos.
"Esta revisi¨®n administrativa es una demanda de los vecinos a la que hemos dado cauce. No se puede tolerar la situaci¨®n de inseguridad que se ha generado. All¨ª abajo se han registado peleas, apu?alamientos y hasta tiroteos", indic¨® Carmen Elorriaga. Uno de los ¨²ltimos casos se registr¨® en mayo pasado. Fue la muerte a balazos de un cubano en el curso de una pelea por un taburete ocurrida en un afterhours de los bajos de Orense. Cuatro meses antes, el due?o de un pub de la zona hab¨ªa sido asesinado.
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