Maragall apela a la habilidad de Zaplana para cerrar el pacto ling¨¹¨ªstico. Maragall dice que el PSOE debe resituarse tras la etapa de Gonz¨¢lez
El ex alcalde de Barcelona Pasqual Maragall apel¨® ayer en Valencia a la "habilidad" de Zaplana para que cierre el pacto ling¨¹¨ªstico, que "se ha complicado". "Quiero que sepa [Zaplana] que desde Catalu?a, la Catalu?a ecu¨¢nime, se ha visto con admiraci¨®n", el dictamen del Consell Valenci¨¤ de Cultura, cuya f¨®rmula es "verdadera y prudente" y recoge el "tronco" com¨²n de la lengua, a?adi¨® el candidato socialista a la Generalitat catalana. Maragall dijo estar seguro de que el secretario general del PSPV, Joan Romero, har¨¢ lo necesario para acordar los miembros de la Acad¨¨mia Valenciana de la Llengua. El ex alcade de Barcelona pronunci¨® anoche una conferencia titulada Ciutat, universitat i empresa: un triangle decisiu en el F¨°rum de Debats de la Universidad de Valencia, con el ex alcalde de Valencia, Ricard P¨¦rez Casado, y el rector Pedro Ruiz, de anfitriones. Ana Noguera y Carmen Alborch estaban entre los asistentes. Antes de pronunciar la conferencia, Maragall contest¨® sobre qui¨¦n debe ser el interlocutor de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, si Joaqu¨ªn Almunia o Josep Borrell, que la falta de experiencia en la direcci¨®n bic¨¦fala del PSOE y el tr¨¢nsito complejo de "una situaci¨®n de dominio de una persona, que ha mandado mucho", en alusi¨®n a Felipe Gonz¨¢lez, provoca problemas de representaci¨®n en el partido. Unos problemas que, no obstante, dijo que se resolver¨¢n con el tiempo. Puso como ejemplo de buena convivencia el caso de Oskar Lanfontaine y Gerhard Schr?der en Alemania y apunt¨® que ¨¦l mismo no tiene problemas con Narc¨ªs Serra, secretario general del PSC. Adem¨¢s declar¨® que espera que las eleciones catalanas no se adelanten, pero que si as¨ª sucede, el PSC y sus posibles aliados electorales, que no defini¨®, est¨¢n preparados. En clave electoral, dijo que incluso un alcalde de CiU le coment¨® que Catalu?a necesita un cambio. y sugiri¨® que un adelanto de las eleciones podr¨ªa ser contraproducente para Jordi Pujol, como lo fue para Jacques Chirac. Ya metido de lleno en el objeto de su intervenci¨®n, Maragall fue muy gr¨¢fico en la descripci¨®n de lo que deber¨ªa ser la aspiraci¨®n de una red de ciudades formada por Barcelona, Valencia, Zaragoza, Montpellier y Palma de Mallorca, entre otras: Conseguir que aparezca su luz en el mapa nocturno de las ciudades europeas con la misma intensidad de las zonas urbanas m¨¢s desarrolladas como Par¨ªs, el eje de Mil¨¢n y Tur¨ªn o el del R¨®dano. Para competir es necesario constituir una macrorregi¨®n con cerca de 15 millones de habitantes con caracter¨ªsticas comunes, una idea que surgi¨® de las reuniones entre representantes del Ayuntamiento de Barcelona, la empresas y la universidad, convocados con el prop¨®sito de marcar las pautas de actuaci¨®n tras las olimpiadas de Barcelona. Tras relatar c¨®mo la ATT se opt¨® por instalarse en Madrid en vez de Barcelona, Maragall a?adi¨® que para conseguir ese n¨²cleo de desarrollo es fundamental tambi¨¦n contar con un aeropuerto con vuelos transoce¨¢nicos. El modelo de Barcelona estuvo presente a lo largo de su intervenci¨®n, en la que coment¨® que uno de los cambios m¨¢s importantes de Espa?a en los ¨²ltimos 20 a?os se localiza en las ciudades. Contra lo que podr¨ªa pensarse, "la aspiraci¨®n del mundo global es formar parte de un territorio" y en este sentido las ciudades constituyen polos de progreso. Un progreso que pasa por el conocimiento depositado en la universidad, pero tambi¨¦n en las empresas. "No hay futuro en las ciudades sin conocimiento", afirm¨® el ex alcalde, que no rehuy¨® los problemas m¨¢s concretos de la realidad urbana. M¨¢s bien al contrario. Se mostr¨® muy sol¨ªcito con una persona mayor que le pregunt¨® la forma de evitar el ruido. Relat¨® el caso de Nueva York, donde existen jueces y fiscales locales que agilizan la justicia, y obligan, por ejemplo, -por la v¨ªa de la disminuci¨®n de pena por trabajos- a limpiar los graffitis a sus autores.
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