Explotaci¨®n o conservaci¨®n

La dial¨¦ctica entre la explotaci¨®n de los recursos naturales y su conservaci¨®n sigue viva en los tres grandes parajes naturales de la regi¨®n. En el caso del parque del Sureste (24.000 hect¨¢reas), esta tensi¨®n se materializa en los intereses de las graveras y su encontronazo con la Consejer¨ªa de Medio Ambiente. De este choque ha resultado la decisi¨®n regional de que las plantas extractoras instaladas en zonas de alto valor ecol¨®gico (por ejemplo, San Mart¨ªn de la Vega, Velilla de San Antonio y en la uni¨®n de los r¨ªos Jarama y Manzanares) tengan que buscar otra ubicaci¨®n antes del 2000.En el parque natural de las cumbres de Pe?alara, el m¨¢s peque?o y sensible de la regi¨®n (768 hect¨¢reas), el principal motivo de preocupaci¨®n ecol¨®gica procedi¨® siempre de la estaci¨®n de esqu¨ª de Valcotos, con m¨¢s de 125.000 visitantes al a?o. Este centro deportivo, y sobre todo su posibilidad de crecimiento urban¨ªstico, amparado por una sentencia del Tribunal Supremo, motiv¨® la intervenci¨®n de la Consejer¨ªa de Medio Ambiente, que inici¨® en septiembre la expropiaci¨®n forzosa de los terrenos como paso previo al desmantelamiento de la estaci¨®n y su reconversi¨®n en una zona de ecoturismo.

Por ¨²ltimo, el parque regional de la Cuenca Alta del Manzanares, el mayor de la regi¨®n (47.500 hect¨¢reas), sufre los problemas propios de su cercan¨ªa a grandes n¨²cleos urbanos. Ubicado entre El Pardo y la sierra de Guadarrama, esta zona protegida creada en 1985 como pulm¨®n verde de Madrid padece la urbanizaci¨®n desproporcionada que caracteriza a la periferia de la capital.