Lars von Trier, preso de sus angustias
Las angustias, los miedos, los infiernos de Lars von Trier quedan al desnudo en el documental que sobre el realizador dan¨¦s se emite hoy en televisi¨®n (Canal +, 15.30). Su nombre es sin¨®nimo de ruptura, de provocaci¨®n, y con s¨®lo cinco pel¨ªculas firmadas se ha convertido en uno de los grandes renovadores del cine europeo. Su ¨²ltimo artefacto, Los idiotas, est¨¢ a punto de estrenarse en Espa?a.Von Trier tiene los ojos verdosos y peque?os, el pelo revuelto y las camisas mal planchadas. Sonr¨ªe mucho, como para ahuyentar los horrores que le impiden coger aviones o no acudir muchas veces a los plat¨®s de sus pel¨ªculas por aut¨¦ntico pavor a ciertos sitios y dirigir, a menudo, desde los monitores. A personaje tan singular le analizan pedazo a pedazo varios de sus colaboradores en El mundo seg¨²n Lars von Trier, de Stig Bj?rkman, en el que el propio protagonista, de 42 a?os, colabora a fondo. "Soy como ese ni?o al que se le mete una espiga en el ojo y ve las cosas feas", se define ¨¦l. Y es que su mirada a la vida no deja indiferente en pel¨ªculas con poderosas im¨¢genes como El elemento del crimen, Europa o Rompiendo las olas, testimonios de un personaje inconformista, vapuleador y raro.
En la cinta queda bien plasmado el Von Trier cineasta, dominador de la t¨¦cnica y buscador incansable de los secretos m¨¢s ¨ªntimos del alma. Ambos se funden, pero tambi¨¦n chocan y le producen crisis, como cuenta la actriz brit¨¢nica Katrin Carlidge. Queda clara la admiraci¨®n de Lars von Trier por su paisano Karl Theodor Dreyer, con quien le compararon a ra¨ªz del estreno de Rompiendo las olas en Cannes, en 1996. All¨ª, Von Trier se llev¨® el Gran Premio del Jurado y lo recogi¨® embotado en un esmoquin del mism¨ªsimo Dreyer que compr¨® en una subasta, con lo que confirm¨® el juicio de la cr¨ªtica.
Pero tambi¨¦n conocemos al Trier ¨ªntimo, al que confiesa haber visto un ovni; que habla de una educaci¨®n recibida en radical libertad, lo que le produc¨ªa una ansiedad de la que todav¨ªa no se ha librado y que quiz¨¢ sea uno de los secretos de su inmenso talento.
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