Tregua

Da la sensaci¨®n de que la tregua anunciada por ETA puede convertirse a corto plazo en un caldo de cultivo para saciar las aspiraciones de unos y otros, intentando acercar el ascua a su propia sardina. Entiendo que en la mesa de negociaci¨®n ha de plantearse un tema: ?estamos dispuestos a aceptar la independencia del pueblo vasco? ?Estamos dispuestos a formalizar una consulta entre los vascos a fin de saber si la desean o no? ?Estamos dispuestos (ambas partes) a asumir el resultado de los comicios? Solucionadas estas cuestiones, hablar de presos, condenas y sus condiciones parece a toda costa estar fuera de lugar. El que mata o mat¨® debe estar en la c¨¢rcel tanto si lo hizo por delito com¨²n como por cualquier motivo que, a su parecer, santificase tan noble acto. Por respeto a los muertos y a las v¨ªctimas, hay temas que no se deben plantear, y menos a¨²n utilizando como moneda de cambio la palabra "paz". Por otra parte, felicitar a los que hasta hace poco tiempo llam¨¢bamos "violentos" por haber ganado el primer asalto de este combate, pues, si bien hace unos meses todos manifest¨¢bamos que en Espa?a no hab¨ªa presos pol¨ªticos, el aceptar una negociaci¨®n con una banda y plantear gestos para facilitar la misma han servido para reconocer un estatuto que hasta ahora hab¨ªamos negado.- . .