Los carillones silenciados de Madrid
El toque de las 14.30 desde las esferas de la torre central del Palacio de Comunicaciones fue en Madrid, durante muchos a?os, la se?al diaria decisiva para separar la ma?ana de la tarde. Era una suerte de referencia que jalonaba la hora de la comida de los madrile?os. La se?al era retransmitida diariamente por los famosos partes, o diarios hablados, de Radio Nacional de Espa?a. Hoy esas esferas han enmudecido.No muy lejos, otro gran reloj, el del Banco Central, hoy Central-Hispano, soltaba al aire sones de conocidos chotis que se mezclaban con el toque horario agudo del gran reloj que corona el cercano Banco de Espa?a, con minutado y saetas de bronce.
Salvo contadas excepciones, la ciudad de Madrid carece hoy de este tipo de m¨²sica urbana, ya que los carillones han sido silenciados en su mayor¨ªa, a diferencia de lo que ocurre en otras ciudades europeas de Suiza, Austria, Reino Unido, B¨¦lgica y Holanda.
Sones europeos
En las ciudades de dichos pa¨ªses, esta m¨²sica prolifera desde sus numerosos relojes de fachada. Sus sones, que incorporan a veces la evoluci¨®n r¨ªtmica de figuras vistosas o deslumbrantes engranajes, otorgan a los espacios urbanos una mansedumbre moment¨¢nea, ritual y alegre, lejos de la prisa y la fatiga ciudadanas.Parece conectarles a su historia, se?aladamente al siglo XVIII, la centuria en la que la Ilustraci¨®n llev¨® la m¨²sica a las alturas.
Abundan tambi¨¦n en Europa, aunque en Madrid escasean, los relojes florales. La ciudad de Algete exhibi¨® uno durante cierto tiempo. Eso s¨ª, requieren de mucha atenci¨®n jardinera.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.