Apego a la tierra
Una cuadrilla poda las ramas de los melocotoneros. "Tienen tres a?os, a¨²n les falta uno para estar a plena producci¨®n". Los ¨¢rboles apenas superan el metro y ocupan poco m¨¢s de dos hect¨¢reas. Hace siete meses y medio, los frutales eran muchos m¨¢s y como apostilla Jos¨¦ Antonio ?lvarez, el due?o La Ribera, "de cuatro a?os, y mucho m¨¢s grandes". Un d¨ªa, los troncos de esos melocotoneros de cuatro a?os amanecieron manchados de negro. El Guadiamar, el r¨ªo con el que linda la finca, hab¨ªa rebasado sus l¨ªmites naturales y esta vez no se trataba de una crecida: la balsa minera de Aznalc¨®llar hab¨ªa reventado y su contenido de lodos t¨®xicos se desparramaba hacia Do?ana. Las aguas del Guadiamar parecen haber recuperado su color habitual, pero el ir y venir de camiones de gran tonelaje y las grandes explanadas de tierra a ambos lados de r¨ªo - antes m¨¢rgenes llenas de vegetaci¨®n-, indican que el valle no ha vuelto a la normalidad. De lo que sus habitantes est¨¢n seguros es de que las cosas no ser¨¢n m¨¢s como antes de aquel 25 de abril. "Si no se hubiesen talado esos melocotoneros, ahora estos hombres tendr¨ªan trabajo para un mes y no para tres d¨ªas", asegura el due?o de La Ribera, se?alando a la decena de hombres que poda los frutales j¨®venes que quedaron en la parte no afectada por la riada. Jos¨¦ Antonio ?lvarez y su esposa, Carmen Moraira, no est¨¢n dispuestos a dejar su finca de 28 hect¨¢reas y se indignan cuando oyen que los que se oponen a vender sus tierras a la Consejer¨ªa de Agricultura son "unos cuantos terratenientes". "Nosotros no queremos que nos avasallen, se est¨¢ empezando a construir la casa por el tejado", sostiene ?lvarez. El corredor verde que pretende realizar la Junta de Andaluc¨ªa a partir de las tierras por las que pas¨® el vertido le parece "innecesario". Al menos 30, de los m¨¢s de 150 propietarios afectados, se resisten a vender sus tierras a Agricultura, bien porque creen que los precios marcados por la Mesa de Valoraci¨®n de la Consejer¨ªa son demasiado bajos o porque no quieren dejar de cultivar estas tierras de vega. La Ribera ocupa, en el t¨¦rmino municipal de Sanl¨²car la Mayor, la esquina que forma el Guadiamar con el puente de Las Doblas, el mismo que el Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas (CSIC), escoge en su ¨²ltimo informe como hito para diferenciar la zona -la m¨¢s cercana a la mina de la empresa Boliden-, en la que quedan "niveles altos a muy altos" de contaminantes en el suelo, del resto de terreno afectado, unas 4.000 hect¨¢reas en total. "No creo que la contaminaci¨®n sea tan grave", indica ?lvarez. Y acusa al presidente del CSIC, C¨¦sar Nombela, de "alarmista": "?Qui¨¦n se va a querer acercar a la vega a comprar fincas o productos?". Este grupo de propietarios se ha alejado en los ¨²ltimos d¨ªas de Asaja, la asociaci¨®n que ha defendido los intereses de los agricultores y que, desde hace dos semanas, ha retomado las conversaciones con la Consejer¨ªa de Agricultura para alcanzar acuerdos con la mayor parte de los afectados. "Si hace falta esperamos dos a?os, pero no nos iremos hasta que alguien nos diga que no se puede cultivar aqu¨ª". El presidente del CSIC dej¨® claro en la exposici¨®n de su ¨²ltimo informe que, si se aplican las t¨¦cnicas de remediaci¨®n que los cient¨ªficos proponen, los suelos quedar¨¢n libres de contaminantes, aunque no supo precisar cu¨¢ndo. La intenci¨®n del Gobierno andaluz es hacerse con los terrenos para realizar el corredor verde, y si no se ponen en venta, recurrir¨¢ a la expropiaci¨®n. "Muy pocos podr¨ªan aguantar un proceso judicial de cinco a?os", reconoce el due?o de La Ribera, quien reclama "como ¨²ltimo recurso", que los propietarios se incorporen al dise?o y gesti¨®n del corredor forestal. Para ello han pedido el respaldo de los alcaldes de los 12 municipios afectados. Los agricultores mantuvieron una reuni¨®n con el alcalde de Sanl¨²car la Mayor, Eustaquio Casta?o, para transmitir sus reclamaciones a la plataforma de municipios. "Queremos que nos digan las cosas claras para poder ayudar", explica Casta?o, dolido por haberse enterado "por la prensa" de las ¨²ltimas conclusiones de CSIC. El alcalde de Sanl¨²car la Mayor y los otros 11 regidores expondr¨¢n hoy al grupo socialista en el Parlamento , los problemas de estos agricultores, entre otros muchos que a¨²n colean tras el vertido. "A¨²n no hemos recibido respuesta", dice Casta?o sobre los 23.000 millones de pesetas en compensaciones pedidos a Junta y Gobierno central.
"Esto es un infierno"
Las tareas de limpieza en el cauce del Guadiamar llevan semanas "casi concluidas", seg¨²n los representantes de las administraciones central y auton¨®mica. "Pues, por aqu¨ª, no paran de pasar", se?ala Jos¨¦ Mar¨ªa Garc¨ªa Hidalgo, que atiende la barra de la venta de Los Estribos, a medio camino entre Sanl¨²car la Mayor y Aznalc¨®llar. Unos 200 camiones-ba?era siguen recorriendo, una y otra vez, las carreteras, muy deterioradas, del circuito de los lodos. "Esto es un infierno", se?ala un transportista en la venta. No hace ni quince d¨ªas que muri¨® el ¨²ltimo conductor en accidente de tr¨¢fico, el quinto desde que empez¨® la operaci¨®n. "Las empresas exigen hacer viajes, pero entre los transportistas hay mucho vivo", reconoce y relata derrapadas, portalones abiertos en plena carretera y pasadas continuas. "Si te entretienes en poner el toldo, te adelantan", dice el conductor que est¨¢ "deseando acabar".
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