Pinochet inicia hoy un largo duelo con la justicia para evitar la extradici¨®n

A las tres de la tarde de hoy, hora peninsular (las dos en Londres), si no hay cambios de ¨²ltima hora, el general senador Augusto Pinochet ser¨¢ trasladado, probablemente en silla de ruedas, al tribunal de Belmarsh, situado en el sureste de Londres, donde comparecen habitualmente los criminales m¨¢s duros y los terroristas. El tribunal est¨¢ unido, a trav¨¦s de un t¨²nel subterr¨¢neo, a la prisi¨®n de m¨¢xima seguridad de Belmarsh, pr¨®xima a Woolwich.

Los tribunales, que son custodiados por una unidad especializada de Scotland Yard, tienen una galer¨ªa para el p¨²blico que se separa por una pared de cristal de la sala donde permanece el magistrado, los letrados de las partes y el acusado. La comparecencia de Pinochet estaba fijada originalmente ante un tribunal de Bow Street, en pleno centro de Londres, ante el magistrado jefe metropolitano Graham Parkinson, pero por razones de seguridad la audiencia que inaugura el procedimiento de extradici¨®n tendr¨¢ lugar en Belmarsh.El inter¨¦s despertado por la audiencia llev¨® a m¨¢s de 100 medios de comunicaci¨®n de todo el mundo a solicitar su acreditaci¨®n en la oficina de prensa del Lord Chancellor, la m¨¢s alta autoridad judicial del Reino Unido, miembro del Gabinete de Tony Blair, que finalmente ha autorizado el acceso a 38 periodistas. El acto previsto por la ley en los casos de extradici¨®n se denomina "audiencia de instrucci¨®n".

Como a lo largo de todo el proceso, solo existen dos partes que litigan: el Gobierno de Espa?a, representado por el abogado Alun Jones, de la Fiscal¨ªa de la Corona, y Pinochet. El magistrado jefe suele en este acto instruir al acusado sobre el conjunto del proceso de extradici¨®n. Normalmente, se examinan los documentos: la petici¨®n espa?ola y la autorizaci¨®n para proceder emitida por el ministro de Interior, Jack Straw, el pasado mi¨¦rcoles 9 de diciembre. Pero en este caso, si la defensa de Pinochet, como ha anunciado, eleva una petici¨®n de revisi¨®n judicial al Alto Tribunal de Justicia, la audiencia de instrucci¨®n suele iniciarse formalmente para ser pospuesta hasta que se resuelva sobre la citada revisi¨®n judicial. La "revisi¨®n" no es un recurso de apelaci¨®n. S¨®lo cuestiona la decisi¨®n de Straw por irracional o por defectos en la forma de resolver, raz¨®n por la cual presuntamente habr¨ªa afectado los derechos de la persona, en este caso de Pinochet.

Por otra parte, Straw, seg¨²n ha anunciado, se ha reservado argumentar con mayor extensi¨®n caso de ped¨ªrselo el Alto Tribunal de Justicia. Si, finalmente, el Alto Tribunal estimase la revisi¨®n judicial, cosa que suele ocurrir muy rara vez, Straw deber¨ªa volver a hacer su resoluci¨®n. Caso contrario, esto es, si el Alto Tribunal de Justicia deniega la revisi¨®n, la defensa de Pinochet puede, de hallar un argumento de peso, acudir a los jueces de la C¨¢mara de los Lores, que hacen el papel de Tribunal Supremo.

Una vez que la revisi¨®n queda resuelta negativamente, esto es, confirma la validez de todos los pasos, el magistrado jefe Parkinson tiene que pronunciarse sobre los documentos y comprobar que, en efecto, los delitos, en este caso de terrorismo y tortura, son los llamados delitos de extradici¨®n" en la ley brit¨¢nica.

Si en efecto es as¨ª e instruye la extradici¨®n de Pinochet, ¨¦ste puede presentar recurso a trav¨¦s de un habeas corpus (protecci¨®n y seguridad) contra dicha instrucci¨®n ante el Alto Tribunal. El fallo de ¨¦ste, a su vez, es suceptible de ser recurrido en este caso ante la C¨¢mara de los Lores. El ¨²ltimo paso es, de considerarse por los tribunales que Pinochet debe ser entregado a Espa?a, la vuelta del dossier a la mesa del ministro Jack Straw.