Un vecino de Alhaur¨ªn y la Guardia Civil se denuncian mutuamente por agresi¨®n Ambas partes se tildan de "borrachos"

Un vecino de Alhaur¨ªn de la Torre y la Guardia Civil se han denunciado mutuamente por agresiones. Como suele ocurrir en estos casos, las versiones difieren radicalmente. La ¨²nica coincidencia es el lugar y fecha en que ocurrieron los hechos: el cuartel del pueblo malague?o, el 4 de diciembre. A partir de ah¨ª, los relatos de lo sucedido no pueden ser m¨¢s opuestos.

Pero hay un hecho constatado: que Benigno Vega, de 33 a?os, vecino de Alhaur¨ªn y alba?il de profesi¨®n, mantuvo una ri?a con varios agentes y que ese mismo d¨ªa un centro de salud malague?o certific¨® que hab¨ªa sufrido una agresi¨®n. El vecino cuenta que sobre las ocho de la noche pas¨® frente al puesto de la Guardia Civil, que hab¨ªa sido inaugurado justamente ese d¨ªa. En otros tiempos, el edificio fue sede del Ayuntamiento, por lo que, asegura, les dijo a los agentes que estaban en la puerta que "eso era la casa del pueblo". Seg¨²n la denuncia que al d¨ªa siguiente present¨® en ese mismo puesto, uno de los guardias civiles lo cogi¨® del cuello y mientras lo llevaba a un despacho, le dijo: "Ahora vamos a estrenar bien el cuartel". A continuaci¨®n, siempre de acuerdo a su versi¨®n, cuatro guardias la emprendieron a patadas y pu?etazos contra ¨¦l. "Dale a la maricona comunista ¨¦sta", asegura que dijeron entre mofas mientras le agred¨ªan. Hematomas y rasgu?os Entonces entr¨® otro agente, que alert¨® al sargento del puesto, quien lo sac¨® del calabozo donde lo hab¨ªan metido, lo llev¨® al centro de salud del pueblo y despu¨¦s a su casa. Este mando es justamente quien al d¨ªa siguiente recogi¨® la denuncia que present¨® Vega por agresi¨®n en ese mismo puesto. El supuesto agredido afirma que no conoc¨ªa a quienes le propinaron la paliza y que en el cuartel le indicaron que eran efectivos que pertenec¨ªan al acuartelamiento de Los Angeles (M¨¢laga) desplazados a Alhaur¨ªn para el acto inaugural. El parte m¨¦dico del Hospital Cl¨ªnico, al que Vega acudi¨® horas despu¨¦s del incidente, refleja que fue v¨ªctima de una "agresi¨®n" y que ten¨ªa hematomas y rasgu?os en distintas partes del cuerpo. Por su parte, el relato sobre lo sucedido que da la Guardia Civil es completamente diferente. La Subdelegaci¨®n del Gobierno, de la que depende el cuerpo, en un principio asegur¨® desconocer que nada semejante hubiera sucedido. Pero inmediatamente se puso a buscar informaci¨®n al respecto y ofreci¨® otra versi¨®n: Vega "se ca¨ªa de borracho", lleg¨® al cuartel, comenz¨® a insultar a los guardias, a dar patadas a las macetas y a "romper cosas como un loco". La Subdelegaci¨®n asegura que cuando apareci¨® por el puesto "ya ven¨ªa ara?ado" y niega que fuera agredido por los agentes. La Guardia Civil inici¨® diligencias por insultos y agresiones. Tanto esta denuncia como la presentada por Vega han pasado a los juzgados de Torremolinos. La abogada del supuesto agredido reconoce que su defendido "hab¨ªa bebido, pero lo normal". En otro cruce m¨¢s de acusaciones Vega acusa en su denuncia que eran los guardias civiles los que "estaban algo bebidos". La letrada est¨¢ a la espera de que el juez decano de Torremolinos turne la denuncia para pedir que se practiquen una serie de diligencias, como la toma de declaraci¨®n al agente que "sorprendi¨® a sus compa?eros cuando se asom¨® al despacho donde estaba siendo agredido y humillado el denunciante", que la comandancia de la Guardia Civil determine qui¨¦nes eran los agentes que estaban en la puerta, que testifique el sargento que lo traslad¨® al centro de salud, que se incorporen a la investigaci¨®n las fotograf¨ªas de las lesiones producidas a su cliente y que ¨¦ste sea visto por un forense. "Esto ha sido una humillaci¨®n. Nos han hecho las Navidades a m¨ª y a mi familia, porque trabajo en la construcci¨®n y ya llevo dos semanas de baja", dice Vega, quien teme perder su puesto de trabajo como consecuencia de este peculiar caso en el que todos son presuntas v¨ªctimas y verdugos.