Guip¨²zcoa cierra la reforma fiscal vasca, que tendr¨¢ diferencias de matiz en cada territorio

VIENE DE LA P?GINA 1 El debate sobre la reforma del IRPF en las Juntas de Guip¨²zcoa constituy¨® una sucesi¨®n de exposiciones y r¨¦plicas sobre los destinatarios de los beneficios fiscales que depara la nueva norma, que supondr¨¢ una merma de 13.600 millones en la recaudaci¨®n (40.000 millones en el Pa¨ªs Vasco). PNV, PSE, EA y PP defendieron que la rebaja de la presi¨®n fiscal beneficia, sobre todo, a los asalariados. El diputado de Hacienda, Antton Marquet, asegur¨® que el coste econ¨®mico de reducir la presi¨®n a los rendimientos de trabajo por cuenta ajena se eleva a 7.200 millones de pesetas. Por el contrario, HB e IU, que hab¨ªan presentado enmiendas a la totalidad, sostuvieron que la reforma privilegia las rentas m¨¢s altas y las de capital. Xabier Olano (HB) afirm¨® que el IRPF se ha convertido en un impuesto sobre el trabajo porque las rentas altas se escabullen a trav¨¦s de los productos financieros. "El trato es desigual respecto a las rentas de capital. Un principio b¨¢sico de equidad manda que los impuestos sean progresivos, pero aqu¨ª s¨®lo lo es para el trabajo, no para el capital, que tributar¨¢ a un tipo fijo (20%)". Xabier Garaialde (PNV) replic¨® que la enmienda socialista para que las rentas de capital tributen al tipo medio tendr¨ªa efectos contraproducentes porque causar¨ªa una "deslocalizaci¨®n de capitales". Marquet hab¨ªa precisado que "lo primordial en este tipo de rentas para saber si son capitales especulativos es el plazo, y cuando permanecen al menos dos a?os no hay que considerarlos como tales". Jos¨¦ Luis Telleria (EA) tambi¨¦n defendi¨® el tipo ¨²nico del 20% para estas plusval¨ªas, porque "no podemos ser una isla fiscal". Ruptura de la igualdad El socialista Jos¨¦ Morcillo argument¨® a favor el tipo progresivo para estos incrementos patrimoniales, al asegurar que "beneficiar¨ªa a todos los que ganan menos de cinco millones de pesetas y al peque?o ahorrador". Mantener el tipo del 20% supone, seg¨²n los socialistas, "la ruptura del principio de igualdad en el tratamiento fiscal de la ciudadan¨ªa". Esta argumentaci¨®n tambi¨¦n fue desarrollada por el juntero de IU Jon Lasa, quien subray¨® que la reforma del modelo fiscal "va a contribuir a crear un sistema cada m¨¢s proporcional y regresivo en el que, a efectos de tributaci¨®n, va a importar menos el nivel de renta que genera cada persona". Lasa consider¨® que la lucha contra el fraude fiscal es m¨¢s "urgente y prioritaria" que la reforma del IRPF, que a su juicio ten¨ªa que haberse dise?ado con criterios de progresividad y capacidad econ¨®mica para "fortalecer las pol¨ªticas de gasto p¨²blico". Sin embargo, apunt¨® que el proyecto aprobado "recorta la progresividad y lamina la suficiencia y equidad del sistema fiscal". El paquete de enmiendas parciales presentadas por los grupos de la oposici¨®n fueron rechazadas una tras otra por el tripartito, mientras que el PP opt¨® por abstenerse. Pese a alcanzar acuerdos para mejorar el tratamiento fiscal de los separados y de los peque?os profesionales, su portavoz, ?lvaro Moraga, justific¨® su abstenci¨®n porque el tripartito hab¨ªa aplicado el "rodillo".

Las tres haciendas vascas y la Agencia Tributaria han optado por dos Impuestos sobre la Renta de las Personas F¨ªsicas de filosof¨ªas opuestas. El PP y el PNV, pese a sus acuerdos en Madrid, han marcado diferencias en sus zonas de influencia. Los populares han rebajado el impuesto a todos por igual; el PNV ha optado por la progresividad -se ha bajado a todos, pero m¨¢s a los que menos ganan-. La bajada media en Euskadi ronda el 10%. La progresividad del IRPF vasco viene determinada en que las principales deducciones se establecen en la cuota (la cifra que queda una vez que se ha aplicado la tarifa), mientras en la reforma estatal se aplican a la base imponible. Otra de las diferencias con la reforma estatal es la tarifa. Mientras en Euskadi el tipo m¨ªnimo se establece en el 17% -antes estaba en el 20%- en el resto de Espa?a est¨¢ en 18%. El tipo m¨¢ximo pasa del 56% al 50% en el Pa¨ªs Vasco y al 48% en territorio com¨²n. En todo caso, la vida del IRPF vasco puede tener una fecha de caducidad: las elecciones a Juntas Generales del pr¨®ximo mes de junio. La estructura central de la norma se ha realizado gracias a un acuerdo entre el PNV y su socio en Guip¨²zcoa y ?lava, el PSE,y con acuerdos puntuales con el PP. Si la actual composici¨®n de las Juntas var¨ªa mucho, algo que puede pasar a tenor de los resultados de las auton¨®micas de octubre pasado, las tres normas pueden tener una vida ef¨ªmera y dispar. Los populares, si tocan poder, y en ?lava tienen muchas posibilidades, ya han anunciado una reforma de la norma orient¨¢ndola al modelo estatal. En Guip¨²zcoa, si EH mantiene los resultados tambi¨¦n podr¨ªa tocar la norma. As¨ª las cosas, la desarmonizaci¨®n fiscal vasca ser¨¢ el quebradero de Juan Jos¨¦ Ibarretxese, impulsor de la reforma y para entonces lehendakari.