El 22,7% de los d¨ªas de baja de los docentes es por depresi¨®n
Durante el curso 1996-1997, los docentes catalanes tomaron un total de 496.062 d¨ªas de baja laboral por enfermedad, de las que el 22,7% eran bajas por causa mental, es decir, depresi¨®n y estr¨¦s. Esa fue la segunda causa de baja laboral, inmediatamente despu¨¦s de las afecciones del aparato locomotor, que causan el 29,8% de los d¨ªas de baja. En tercer lugar figuran, a mucha distancia, las enfermedades de la laringe (7,4%) y las respiratorias (6,1), seg¨²n un informe de la inspecci¨®n m¨¦dica del Departamento de Ense?anza.
Aunque el informe no especifica el n¨²mero total de docentes que estuvieron de baja, indica que la media mensual fue del 6,1% de la plantilla de ense?antes, dos puntos por encima del curso anterior. El mes en que hubo m¨¢s bajas fue el de febrero, con el 9,9%. Todos los indicadores apuntan a que se est¨¢ produciendo un incremento. Datos del Ministerio de Educaci¨®n corroboran este aumento: mientras que en el curso 1989-1990 el porcentaje de docentes que tom¨® alguna baja por enfermedad fue el 15,09%, en el de 1994-1995 creci¨® hasta el 19,68%. Algunos sindicatos consideran, sin embargo, que los informes oficiales no reflejan la gravedad del problema. La Intersindical-CSC (Confederaci¨®n Sindical Catalana) afirma que en las estad¨ªsticas oficiales se deber¨ªan incluir tambi¨¦n las ausencias laborales por causa m¨¦dica que no se catalogan como baja por ser inferiores a cuatro d¨ªas. Entre estos casos, seg¨²n el psic¨®logo Llu¨ªs Folch, se encuentran muchas personas con problemas de estr¨¦s y depresi¨®n, a quienes no se ha diagnosticado el trastorno mental o no se atreven a pedir la baja. V¨¢lvula de escape Pero tambi¨¦n hay casos de absentismo cuya causa no est¨¢ justificada. El director del centro p¨²blico Barri Bes¨°s, de Barcelona, Carlos D¨ªaz, considera preocupante el absentismo que se produce entre los profesores: "En mi instituto, con una plantilla de 50 personas, siempre hay tres o cuatro docentes que no asisten a clase. Y en otros centros el absentismo es parecido". En opini¨®n de D¨ªaz, la causa de este aumento puede ser la forma en que se est¨¢ aplicando la reforma, que est¨¢ provocando desmoralizaci¨®n entre el profesorado. "La Administraci¨®n deber¨ªa controlar este absentismo, pero no lo hace. Parece que Ense?anza utiliza la permisividad en las ausencias laborales como v¨¢lvula de escape para los docentes", se?ala D¨ªaz. Este director de instituto cree que la soluci¨®n es reducir el n¨²mero de alumnos por clase y crear aulas taller para los ni?os m¨¢s problem¨¢ticos. Las bajas por depresi¨®n y estr¨¦s ocupan el cuarto puesto en cuanto a n¨²mero de docentes afectados, pero se trata de la patolog¨ªa que plantea las ausencias m¨¢s prolongadas; de ah¨ª que globalmente tenga una mayor incidencia. Las bajas por depresi¨®n y estr¨¦s afectan m¨¢s a los docentes de secundaria que a los de primaria. En la delegaci¨®n de Barcelona-comarcas constituyen el 9,9% del total en el caso de los profesores, frente al 8,62% de los maestros. S¨®lo en las delegaciones de Tarragona y de Barcelona-ciudad el n¨²mero de bajas por enfermedad mental fue superior en las escuelas que en los institutos. Este fen¨®meno se explica, seg¨²n los expertos, por los cambios que est¨¢ viviendo la secundaria. Las edades m¨¢s dif¨ªciles del alumnado -las llamadas edades de crisis- son las comprendidas entre 3 y 5 a?os y entre 14 y 16. La reforma escolar, que ha extendido la obligatoriedad hasta los 16 a?os, ha supuesto un cambio para los docentes de instituto, acostumbrados a impartir clases a un alumnado que sufr¨ªa el filtro de la EGB. Ahora, estos profesores tienen que dar clases a todos los alumnos procedentes de la primaria, lo que representa para ellos un mayor esfuerzo y estr¨¦s. Llu¨ªs Folch afirma que la inseguridad de los profesores puede repercutir sobre los alumnos. "Especialmente en las edades de crisis, que es cuando el alumno m¨¢s necesitan la figura del profesor". Folch distingue entre las bajas por depresi¨®n y las causadas por estr¨¦s. "La depresi¨®n es producto de la falta de autoestima del profesorado, mientras que el estr¨¦s es consecuencia de un conflicto interior: le gusta el trabajo, pero ¨¦ste le desborda y no satisface sus necesidades. Con el estr¨¦s, los profesores acumulan odio, y esto les desgasta".
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