De la excavadora al cincel
N¨²?ez y Navarro, la promotora del presidente del FC Barcelona, est¨¢ transformando su estrategia empresarial. Esta inmobiliaria, conocida hasta ahora por el centenar largo de edificios cl¨®nicos levantados en el Eixample de Barcelona y por su escaso aprecio por el patrimonio arquitect¨®nico y la est¨¦tica urbana, parece estar dispuesta a sustituir las excavadoras por el cincel de la rehabilitaci¨®n. Destruir esquinas y levantar bloques, los preceptos del viejo orden que hicieron de Josep Llu¨ªs N¨²?ez un midas predemocr¨¢tico del porciolismo, est¨¢n de capa ca¨ªda. Obligado por la escasa oferta de suelo edificable, N¨²?ez prefiere ahora rehabilitar edificios emblem¨¢ticos. Las llamadas ¨¢reas de nueva centralidad -el caso de la Villa Ol¨ªmpica- y el uso masivo de las rondas han abierto por primera vez en este siglo el mercado del suelo en Barcelona. El mismo modelo urban¨ªstico impide a los grandes promotores actuar como el cartel de precios que fueron en otro tiempo. Impelidos por esta din¨¢mica, los grupos N¨²?ez y Navarro, H¨¢bitat, Llave de Oro y Reyna, entre otros, reorientan parte de su actividad hacia la recuperaci¨®n del centro hist¨®rico. Precisamente con la idea de rehabilitar, N¨²?ez y Navarro adquiri¨® el pasado verano la antigua sede de Tabaco de Filipinas, construida en 1880 y redise?ada despu¨¦s por el arquitecto Josep Maria Sagnier y Vidal. Este reformismo urbano, sustituto de la destrucci¨®n creativa defendida en otros tiempos por el promotor, est¨¢ contrastado: N¨²?ez y Navarro est¨¢ realizando reformas en dos edificios modernistas que conforman una de las esquinas de la Gran Via de Barcelona y la calle de Ll¨²ria. Adem¨¢s, siguiendo el estilo de los grupos franceses Cr¨¦dit Foncier o Pierre I, la promotora ha iniciado la reforma del edificio racionalista que fue sede del diario El Noticiero Universal, situado en la calle de Ll¨²ria y construido en 1966 por el arquitecto Josep Maria Sostres i Maluquer. El Crillon de Par¨ªs Este cambio hacia el buen gusto coincide con el mayor protagonismo dentro de la empresa de la segunda generaci¨®n, representada por Josep Maria N¨²?ez y Navarro, hijo del presidente del Bar?a y de Maria Llu?sa Navarro. A partir de la influencia positiva de este N¨²?ez hijo -su hermano, Josep Llu¨ªs N¨²?ez y Navarro, desempe?a la vicepresidencia del FC Barcelona y dedica gran parte de su tiempo al club de f¨²tbol-, la poderosa inmobiliaria podr¨ªa involucrarse al fin "en el tren de la Barcelona limpia del 2004", seg¨²n un anhelo expresado desde fuentes municipales. El nuevo escenario enmarca la se?alada rehabilitaci¨®n de Tabacos de Filipinas, un edificio adquirido por 2.000 millones de pesetas con la idea de convertirlo en uno de los hoteles m¨¢s lujosos de Europa, "tan s¨®lo comparable al mismo Crillon de Par¨ªs", seg¨²n han expresado medios oficiales de la propia empresa. Algunos arquitectos barceloneses, que recuerdan anteriores aproximaciones fallidas del promotor al dise?o de calidad, se preguntan si N¨²?ez conservar¨¢ los capiteles del vest¨ªbulo de la entrada principal del inmueble de Tabacos de Filipinas; si ser¨¢ capaz de mantener intactas las acaracoladas caobas y los alf¨¦izares que adornan los despachos de su planta noble, y si conservar¨¢ intacta la sala de juntas del primer piso, dise?ada por el presidente fundacional, Eusebi G¨¹ell Bacigalupi. Los expertos desconf¨ªan de las cautelas dispuestas en el cat¨¢logo del Patrimonio Art¨ªstico de Barcelona, ya que lo consideran insuficiente ante el ansia demoledora de las constructoras. Esta desconfianza se alimenta en la experiencia del pasado. No es la primera vez que el grupo N¨²?ez y Navarro compra una finca emblem¨¢tica de Barcelona y anuncia su redise?o para convertirla en en un hotel de lujo. Ocurri¨® exactamente as¨ª hace m¨¢s de 10 a?os, cuando Josep Llu¨ªs N¨²?ez adquiri¨® La Tamarita, una torre noucentista, antigua propiedad de la familia Basso, situada al principio de la avenida del Tibidabo, frente a La Rotonda. En aquella ocasi¨®n, la promotora, despu¨¦s de anunciar que levantar¨ªa un hotel de lujo sin modificar la antigua mansi¨®n, entabl¨® una larga disputa con el Ayuntamiento y la Generalitat encaminada a ampliar la edificabilidad del entorno; pero, al final, no obtuvo el permiso ni tampoco pudo irrumpir con las excavadoras en los 10.000 metros cuadrados del jard¨ªn de la finca, dise?ado por Nicolau Rubi¨® y Tudur¨ª. Finalmente, La Tamarita pas¨® a la Universidad Ramon Llull en r¨¦gimen de usufructo, despu¨¦s de que N¨²?ez y Navarro permutara esta cesi¨®n a cambio de permisos para levantar edificios en otras zonas de la ciudad. A lo largo de muchos a?os, las escaramuzas de N¨²?ez ante la Administraci¨®n para incrementar la edificabilidad de sus solares han registrado un variado muestreo. La m¨¢s singular de tales escaramuzas se produjo en la Casa Golferichs, en la Gran Via -un edificio modernista de 1901, obra de Rubi¨® i Bellver-, popularmente conocido como El Xalet. N¨²?ez lo adquiri¨® en 1972, y al d¨ªa siguiente de la compra, espoleado por los ¨¦xitos de aquella etapa preconstitucional, decidi¨® demoler el inmueble para levantar de inmediato un bloque de pisos. Sin embargo, el constructor tuvo que claudicar y acab¨® cediendo el edificio al Ayuntamiento tras las protestas de las asociaciones de vecinos. Mucho tiempo despu¨¦s, la Casa Golferichs se abri¨® al p¨²blico cediendo parte de su uso a la Fundaci¨®n Pi i Sunyer de Estudios Auton¨®micos y Locales. Beneficio psicol¨®gico En otros casos, como el de la esquina entre Balmes y Bergara o el de una casa modernista de dos plantas en la calle de Ravella, N¨²?ez tampoco consigui¨® imponer la ley de las excavadoras y sus recursos legales acabaron estrell¨¢ndose en la Audiencia o en el mismo Tribunal Supremo. Pese a proclamar t¨ªmidamente su giro hacia objetivos m¨¢s nobles, N¨²?ez y Navarro, SA -una concentraci¨®n de recursos cercana al bill¨®n de pesetas-, no ha modificado el secretismo que envuelve las cuentas anuales de la compa?¨ªa ni ha permitido salir del anonimato a sus consejeros, que a su vez son miembros del n¨²cleo familiar. Entre los operadores inmobiliarios se da por descontado que la promotora debe a la presidencia del Bar?a una parte dificil de evaluar de su liderazgo en el sector. Sus competidores est¨¢n convencidos del enorme beneficio psicol¨®gico que ha obtenido N¨²?ez vendiendo pisos a socios y simpatizantes azulgrana, que rechazan otras ofertas.
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