Hostil, pero menos

El Atl¨¦tico de Madrid jug¨® ayer en territorio hostil, aunque en ning¨²n momento se alter¨® la normalidad y al final su visita qued¨® reducida a un partido de f¨²tbol. La estrecha y continua compa?¨ªa de la Ertzaintza facilit¨® el martes la llegada del equipo colchonero y ayer la estancia en la capital donostiarra.La vigilancia policial evit¨® cualquier conato de gresca. Varias patrullas de la Ertzaintza, que multiplic¨® como nunca antes sus efectivos para esta ocasi¨®, lograron que los jugadores dieran con la entrada al estadio sin problemas; s¨®lo unos silbidos y alg¨²n grito insultante proferido por medio centenar de personas reunidas en ese punto emborronaron el comportamiento de la mayor¨ªa.

Por la ma?ana, los jugadores del club madrile?o se entrenaron en las instalaciones de Zubieta, donde tambi¨¦n se extremaron las medidas de seguridad para impedir la presencia masiva de seguidores asiduos a estas citas que pudiera perturbar la sesi¨®n preparatoria.

La salida al c¨¦sped de Anoeta de los jugadores atl¨¦ticos fue recibido por el p¨²blico donostiarrra con un estruendoso abucheo, dejando en segundo plano otras proclamas que incitaban a la violencia. M¨¢s all¨¢ de los c¨¢nticos contra el conjunto madrile?o, el reencuentro de los dos equipos tras la muerte de Aitor Zabaleta discurri¨® por cauces pac¨ªficos y deportivos, tal y como reclam¨® un hermano del seguidor realista apu?alado en Madrid. La ausencia de miembros del Frente Atl¨¦tico y de otros seguidores rojiblancos identificados como tales ayudaron a que la fiesta discurriera en paz. San Sebasti¨¢n celebr¨® ayer su d¨ªa grande del a?o y cerca de 12.000 donostiarras participaron en la Tamborrada en medio de un ambiente festivo que tuvo su reflejo en Anoeta.