Nuevo desacuerdo con Lafontaine

Duisenberg parece destinado a pelearse con el superministro de Finanzas alem¨¢n, Oskar Lafontaine. "El BCE no comparte la idea", lanzada por el ministro, de lograr, "ex ante, un acuerdo entre la autoridad monetaria, los gobiernos y los interlocutores sociales europeos para seguir determinada pol¨ªtica en sus respectivos ¨¢mbitos" y enfatizar el objetivo del crecimiento econ¨®mico y la creaci¨®n de empleo, manifest¨® ayer el banquero y ex ministro de Hacienda holand¨¦s. La coincidencia, en todo caso, deber¨¢ ser ex post, y llegar¨ªa por el ejercicio independiente de la responsabilidad de cada actor.La prioridad del BCE, record¨® Duisenberg, se circunscribe a perseguir la estabilidad de precios, como marca el Tratado.

?ste es el tercer pulso p¨²blico entre el ministro y el banquero. Antes se enfrentaron por las llamadas de Lafontaine a que el BCE bajase los tipos de inter¨¦s dada la debilidad de la coyuntura (lo que acab¨® haciendo hasta el 3% en diciembre), lo que Francfort consider¨® una injerencia en su independencia, y por la sugerencia del ministro de establecer bandas de fluctuaci¨®n entre el euro, el d¨®lar y el yen, considerada t¨¦cnicamente inconveniente por el BCE.

Pero el holand¨¦s se mostr¨® ayer m¨¢s delicado. Tras insistir en que los gobiernos deben extremar la lucha contra el d¨¦ficit, asegur¨® que continuar¨ªa "subrayando las amenazas de incumplimiento del Pacto de Estabilidad, igual que los ministros de Hacienda opinar¨¢n sobre la pol¨ªtica monetaria". Al menos, los interlocutores se reconocen ya como tales.