Tranquilidad en la oficina de reclamaciones

En la oficina de reclamaciones de multas del Ayuntamiento de Madrid, en el Cuartel del Conde Duque, pocos hablaban ayer de la pol¨¦mica. Tampoco parec¨ªa que se hubiesen registrado grandes alteraciones en la rutina de la dependencia. Un funcionario, con una singular sonrisa en el rostro, lo explic¨® sin titubear: "Aqu¨ª no pasa nada. La gente no nos ha hecho ninguna reclamaci¨®n por el l¨ªo de las firmas falsas. Al contrario, han venido a recurrir sus multas normalmente, como todos los d¨ªas". Y agreg¨®: "Siempre vienen diciendo las mismas cosas, que enfermaron de urgencia y que por eso aparcaron mal, o que el coche se estrope¨®; de todas maneras, eso no servir¨¢ para que les quitemos las sanciones".

En la oficina se volvieron a escuchar los mismas reclamaciones de siempre.

Un hombre, que no quiso identificarse, protestaba, airado, por una multa que consideraba injusta. Dec¨ªa que tiempo atr¨¢s vendi¨® su coche y ¨¦ste pas¨® a nombre del nuevo due?o; pero las multas siguen lleg¨¢ndole a ¨¦l. "Yo trabajo y he perdido todo el d¨ªa por venir aqu¨ª y no me resuelven nada. Tendr¨ªan que ser m¨¢s cuidadosos en estas cosas", se?al¨®.

Otra persona fue m¨¢s all¨¢ y sin ning¨²n miedo opin¨® sobre el esc¨¢ndalo de las firmas falsificadas. "Son cosas que se esperan y que no sorprenden nada en una administraci¨®n como ¨¦sta. Deber¨ªan hacerlo todo de forma escrupulosa y legal porque es un derecho que tiene la ciudadan¨ªa", dijo.

Otro vecino, bastante molesto, cont¨® el motivo de su visita. Recibi¨® una multa por haber aparcado en doble fila el d¨ªa 28 de diciembre, pero no recuerda haberlo hecho. Cuando se enter¨® del fraude en la firma de las multas, se enfad¨®: "Ah, claro, falsifican las firmas y encima le toca pagar a uno. La m¨ªa es del 28 de diciembre, pero ahora se me ocurre pensar que a lo mejor fue una inocentada de la Polic¨ªa Municipal", brome¨®.