Puntualizaciones
Sus corresponsales en Bruselas han publicado en los ¨²ltimos d¨ªas diversos art¨ªculos sobre el Parlamento Europeo y sobre mi persona, en algunos casos informando y en otros opinando. Si bien la mezcla de informaci¨®n y opini¨®n en un mismo texto va en contra del libro de estilo de su peri¨®dico, respeto esas opiniones como respetar¨ªa cualesquiera otras.Sin embargo, s¨ª quisiera rectificar algunas de las informaciones, ya que creo que sus lectores tienen derecho a la m¨¢s correcta informaci¨®n posible.
En primer lugar, no es cierto que el mandato dado por el Parlamento al comit¨¦ de expertos encargado de verificar la veracidad de las acusaciones de mala administraci¨®n contra la Comisi¨®n Europea fuese redactado sin el respaldo del servicio jur¨ªdico de la instituci¨®n. Existen no una, sino dos notas al respecto, y ambas anteriores a la decisi¨®n, como es l¨®gico. Con una simple llamada a mi gabinete su peri¨®dico hubiera podido comprobar que el mandato aprobado por los presidentes de los grupos era el sugerido por los juristas.
En segundo lugar, tampoco es cierto que ese mandato vulnere el Tratado de la Uni¨®n ni que conlleve suspender un art¨ªculo del mismo. Eso ser¨ªa simplemente imposible. El art¨ªculo 214 del Tratado proh¨ªbe a los funcionarios europeos divulgar secretos profesionales a los que tengan acceso por su trabajo y que pueden tener repercusiones de tipo econ¨®mico (por ejemplo, en el caso de litigios en materia de derecho de la competencia). Pero ni este art¨ªculo ni el estatuto de los funcionarios les proh¨ªbe informar a sus superiores sobre posibles irregularidades en el seno de los servicios, ya que su obligaci¨®n estatutaria es precisamente dar a conocer esos posibles casos. La menci¨®n del art¨ªculo 214 en el texto del mandato busca precisamente evitar que alguien se ampare en esa disposici¨®n para no cumplir con su obligaci¨®n, y as¨ª lo entendi¨® desde el primer momento la propia Comisi¨®n Europea. Por ¨²ltimo, he de dejar claro que ni en las declaraciones hechas a la revista Focus ni en ning¨²n otro momento he "aconsejado" a Manuel Mar¨ªn que dimita. Basta con leer las referidas declaraciones para comprobar que el nombre de este comisario se cita ¨²nicamente en otra parte completamente distinta de la entrevista.
Espero de su caballerosidad tenga a bien publicar estas puntualizaciones. Aprovecho para agradecerle el "perfil" publicado el pasado domingo, d¨ªa 7, del que se deduce que he sido muy buen presidente hasta el momento en que mi concepto de la imparcialidad y el de su corresponsal han dejado de coincidir. ?Qu¨¦ le vamos a hacer!- presidente del Parlamento Europeo.
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