"HORMIGUICIDIO" EN OURENSE

Ya se sabe que algunas costumbres ancestrales de los pueblos espa?oles resultan un tanto rudas. En Laza (Ourense) ya conoc¨ªan la fascinaci¨®n que despiertan sus carnavales entre los antrop¨®logos estadounidenses, pero nunca pudieron pensar que esas viejas pr¨¢cticas festivas suscitasen tambi¨¦n las iras de los defensores de los animales. En Laza no acorralan a ninguna vaquilla ni despe?an una cabra por el campanario de la iglesia. Su sa?a se dirige a las hormigas, objetivos que, no por m¨¢s diminutos y abundantes, carecen de derechos, seg¨²n el particular punta de vista de algunos ecologistas. El hormiguicido consiste en rociar a los insectos con vinagre e introducirlos en sacos para que los mozos del pueblo los arrojen con ramas a los viandantes. El Antroido de Laza siempre ha sido un motivo de orgullo para Ourense, pero nadie reparaba en el da?o causado a las v¨ªctimas inocentes de la celebraci¨®n. En socorro de las hormigas acaba de acudir la Asociaci¨®n Nacional para la Protecci¨®n y el Bienestar de los Animales, que envi¨® una carta al consejero gallego de Medio Ambiente, Carlos del ?lamo, para instarle a que no consienta que los invertebrados sufran ese "maltrato monstruoso", propio de un "acto depredador". Los hormig¨®filos denuncian la destrucci¨®n masiva de nidos y aseguran que algunos vecinos incluso se complacen en pasar a los bichos por el horno. A partir de ahora, mucho cuidado con lo que se hace ante una invasi¨®n de cucarachas o ante los ataques veraniegos de los mosquitos. Ni las razias contra las moscas pueden quedar impunes.- ,