El piloto economista
Marc Gen¨¦ se licenci¨® en la Universidad de Buckingham, pero su destino siempre estuvo m¨¢s ligado a la gasolina que a los despachos
El d¨ªa que Marc Gen¨¦ Guerrero recibi¨® su diploma universitario de manos de la mism¨ªsima Margaret Thatcher, su mente estaba ya en otro sitio. Desde peque?o, por culpa de su padre y de su hermano mayor, Jordi, lo que mueve sus pasos es la gasolina. ?l no estudi¨® en la Universidad de Buckingham como argumento inicial para su carrera profesional como economista. Lo hizo porque estaba en el Reino Unido labr¨¢ndose un porvenir como piloto de coches.Sin embargo, hasta hace aproximadamente un a?o, el esfuerzo hab¨ªa servido de poco y Marc estuvo a punto de abandonar el automovilismo y aprovechar los otros conocimientos adquiridos en Inglaterra. Entr¨® en una empresa de auditor¨ªa sin saber que al poco la iba a dejar para hacer realidad su mayor ilusi¨®n, convertirse en piloto de f¨®rmula 1.
La entrada de Gen¨¦ en la F-1 ha sido una sorpresa. Su caso encuentra pocos precedentes y se ha debido a la convergencia de circunstancias casi irrepetibles. A pesar de su excelente calidad como piloto, el prestigio del noi de Sabadell -que ahora vive en Bellaterra- dentro del gran circo dif¨ªcilmente le hubiera subido en un monoplaza esta temporada de no mediar, sobre todo, el apoyo que su proyecto ha recibido de la Administraci¨®n y el patrocinio de Telef¨®nica.
El equipo italiano Minardi, ya se sabe, no es la panacea, pero que uno de sus hijos haya llegado finalmente a la cumbre colma al se?or Esteve, un hombre cuya vida ha transcurrido entre su industria textil y las carreras automovil¨ªsticas de sus herederos. Jordi se qued¨® a las puertas de la F-1 despu¨¦s de ser, durante muchos a?os, el principal candidato a heredar el legado de Luis P¨¦rez Sala y Adri¨¢n Campos, los ¨²ltimos espa?oles que, sin gran fortuna y condicionados por la precariedad de su escuder¨ªa, compitieron en la F-1, tambi¨¦n con Minardi, hace ya 10 a?os.
Precisamente Campos, ahora director de una escuder¨ªa, proporcion¨® a Marc la posibilidad de correr en 1998 en el Open Fortuna by Nissan. Aquel campeonato actu¨® como una catapulta, puesto que al ganarlo, Gen¨¦ vio abrirse una puerta porque pudo probar el Minardi. Ese d¨ªa en Montmel¨® convenci¨® a todos de su potencial. "Estoy en una nube. A¨²n no estoy convencido de que lo que me est¨¢ ocurriendo sea algo real y tangible", dijo al cabo de pocas semanas, poco despu¨¦s de que se confirmara su ingreso en la F-1, aunque sabe que lo que tiene delante es una tarea ardua.
Adem¨¢s de la suerte y ese famoso requisito de estar en el lugar adecuado en el momento oportuno, Marc Gen¨¦, de s¨®lo 24 a?os, atesora cualidades que le convierten tambi¨¦n en el yerno que muchas suegras quisieran tener. Es simp¨¢tico, exquisito en el trato, discreto, culto y puede cocinar. Y es un aut¨¦ntico pol¨ªglota: habla catal¨¢n, castellano, ingl¨¦s, italiano y franc¨¦s.
Tambi¨¦n es un tipo del siglo XXI, habituado a trabajar desde hace a?os con ordenador, su gran compa?ero en los a?os que vivi¨® en el Reino Unido, y que tiene su propia direcci¨®n de internet (hiperv¨ªnculo http://www.marc-gene.com).
Y, que nadie se enga?e, se trata igualmente de un muchacho como cualquier otro de 24 a?os, con las mismas aficiones que los dem¨¢s chicos de su edad, pero con la peculiaridad de que le agrada todo tipo de aventura, sobre todo bucear en la Costa Brava.
Como piloto, la andadura que arrancar¨¢ el 7 de marzo en el Gran Premio de Australia, en Melbourne, se anuncia incierta. No porque no sea bueno y r¨¢pido. Eso es algo que ya ha demostrado a lo largo de toda su vida deportiva, una aventura que comenz¨® a los 13 a?os corriendo con karts. All¨ª ya demostr¨® que la competici¨®n siempre se le ha dado bien. Algo que volvi¨® a evidenciar el a?o pasado cuando arras¨® en el Open Fortuna by Nissan, y a¨²n m¨¢s recientemente, en las primeras pruebas que ha realizado este mismo mes en el circuito de Montmel¨® con Minardi, en las que logr¨® que su tiempo fuera bajando de forma progresiva, a pesar de que el material del que dispone debe mejorar a¨²n ostensiblemente para darle buenas opciones en el campeonato.
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