El Ej¨¦rcito se suma a las tareas de rastreo de bombas en las playas de Tarragona
Una decena de soldados del cuerpo de t¨¦cnicos en desactivaci¨®n de explosivos del Ej¨¦rcito de Tierra se sumaron ayer a los 30 agentes de la Guardia Civil y del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa que rastrean las playas del centro de la Costa Daurada, en Tarragona, en busca de m¨¢s artefactos que pueden formar parte de la campa?a de extorsi¨®n a los patronatos de turismo de la zona. Los investigadores conf¨ªan en desvelar la identidad del autor o autores de las amenazas de forma inminenteLa unidad de desactivaci¨®n del Ej¨¦rcito lleg¨® ayer a las playas de Cambrils (Baix Camp) procedente de Zaragoza. La Guardia Civil reclam¨® la participaci¨®n de los soldados en vista de la amplitud de la zona -unos 60 kil¨®metros, entre Roda de Bar¨¤ y Mont-roig- en la que es posible que se hayan colocado m¨¢s artefactos. De forma paralela, continuaron los rastreos en las playas de Salou y Tarragona, tanto a cargo de efectivos del instituto armado como de la polic¨ªa.
El recurso al Ej¨¦rcito denota la gran preocupaci¨®n existente en las poblaciones afectadas. Se habla de un total de seis bombas preparadas para estallar. Contin¨²a la investigaci¨®n sobre qui¨¦n ha colocado los artefactos, dos de los cuales ya estallaron y causaron la muerte a un jubilado de Manresa y heridas de consideraci¨®n a un agente de la Guardia Civil, y se espera detener al autor o autores de forma inminente.
Los artefactos encontrados hasta ahora son sencillos. Un cilindro met¨¢lico de unos cinco cent¨ªmetros de ancho relleno de p¨®lvora cloratada muy sensible -algo que cualquiera puede obtener de unos cohetes adquiridos en cualquier establecimiento de juegos pirot¨¦cnicos-, un poco de gravilla y dos tapas cubiertas por esparadrapo blanco.
Tranquilidad
La grava, con un simple movimiento del cilindro, roza la p¨®lvora y produce la chispa y la posterior explosi¨®n. La elaboraci¨®n de esta bomba no requiere conocimientos t¨¦cnicos especiales. Es de tipo Niple, utilizada por el Ej¨¦rcito norteamericano durante la I Guerra Mundial y descartada posteriormente por su escasa potencia. Su sencillez motiv¨® que posteriormente la usaran los movimientos guerrilleros suramericanos.
En el caso de Tarragona, el objetivo de los autores de los artefactos no es, en modo alguno, pol¨ªtico, seg¨²n fuentes de la investigaci¨®n. Los patronatos de Turismo de Salou, Cambrils y Tarragona recibieron sendos an¨®nimos en los que se exig¨ªa el pago de 100 millones de pesetas para que las playas de la Costa Daurada no estallaran.
No es la primera vez que los intereses tur¨ªsticos de la zona sufren los efectos de las bombas: un atentado terrorista en el aeropuerto de Reus, en 1996, ya sembr¨® el p¨¢nico, y un a?o antes ETA hizo de los hoteles de Salou su objetivo con la colocaci¨®n de artefactos en lavabos p¨²blicos y papeleras. La preocupaci¨®n por las repercusiones que los ¨²ltimos sucesos pueden tener en la afluencia de visitantes es patente. La Costa Daurada recibe una media de m¨¢s de dos millones de turistas al a?o. Con todo, los empresarios hacen un llamamiento a la calma. Salvador Pellicer, secretario de la Asociaci¨®n Hotelera de Salou, afirma: "De momento impera la tranquilidad, la temporada todav¨ªa no ha empezado y confiamos en una r¨¢pida resoluci¨®n policial", pese a que el sector est¨¢ inquieto ante la posible detecci¨®n de nuevos artefactos.
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