Un comerciante espa?ol, secuestrado por delincuentes en Chiapas
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El espa?ol Miguel Rivera Gonz¨¢lez, de 27 a?os, domiciliado en M¨¦xico desde hace a?os, y su novia mexicana, Maite Villatoro, fueron secuestrados el pasado viernes en Tuxla Guti¨¦rrez, la capital del Estado de Chiapas, y los delincuentes que perpetraron el hecho exigen seis millones de pesos (90 millones de pesetas) por su liberaci¨®n. Miguel Rivera naci¨® en Carballi?o (Orense), aunque se estableci¨® en M¨¦xico, pa¨ªs al que sus padres emigraron muchos a?os atr¨¢s.
En el momento del secuestro, los padres se encontraban en Galicia con una de las dos hermanas de Miguel, pero volvieron a M¨¦xico urgentemente. Miguel es sobrino de Ces¨¢reo Rivera, antiguo jugador del Celta de Vigo.El secuestro se cometi¨® hacia las nueve de la noche en la avenida Centro, frente a la Iglesia de Guadalupe de Tuxla Guti¨¦rrez, cuando Miguel y su novia sal¨ªan de un peque?o negocio de muebles de car¨¢cter familiar. Los Rivera no son grandes empresarios, ya que ¨²nicamente tienen dos tiendas de muebles sencillos, seg¨²n fuentes diplom¨¢ticas. La pareja entr¨® en la furgoneta de su propiedad pero Miguel no tuvo tiempo de arrancarla. Inmediatamente dos hombres armados, situados uno a cada lado de las puertas delanteras del veh¨ªculo les enca?onaron. Desaparecieron con la furgoneta, una Chevrolet Cheyene. Posteriormente, entraron en contactos con un hermano gemelo de la v¨ªctima para fijar la cuant¨ªa del rescate.
El secuestro contin¨²a siendo una industria rentable en M¨¦xico y no pocos espa?oles, acomodados emigrantes asentados en este pa¨ªs, o sus hijos, lo han sufrido. El ¨²ltimo secuestrado, el 30 de julio de 1998, fue el empresario Manuel Rodr¨ªguez D¨ªaz, de 67 a?os, nacido en Asturias, constructor en Oaxaca. Fue puesto en libertad el 27 de noviembre.
Algunos espa?oles afincados en este pa¨ªs decidieron abandonarlo y domiciliarse en Espa?a en la mayor¨ªa de los casos. Alguno pag¨® el secuestro con su vida. El empresario Fernando Nieves Urribarri, de 71 a?os, fue asesinado a golpes en agosto del pasado a?o por una banda que intent¨® llev¨¢rselo a la fuerza. Aun despu¨¦s de haberle matado, los delincuentes trataron de enga?ar a sus parientes exigi¨¦ndoles medio mill¨®n de pesetas por una vida ya extinguida. Nieves era fabricante de equipos de panader¨ªa, y fue atacado al poco de llegar a su negocio, hacia las ocho de la ma?ana.
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