Vintr¨® justifica la exclusi¨®n de Rauxa del comedor del Clot por un imperativo legal

El Ayuntamiento de Barcelona sali¨® ayer al paso de las numerosas criticas surgidas al conocerse que la cooperativa Rauxa hab¨ªa sido excluida del concurso para la adjudicaci¨®n del servicio del comedor social del Clot, pese a que llevaba gestion¨¢ndolo desde 1995 y presentaba la mejor oferta social y econ¨®mica. Eul¨¤lia Vintr¨® insisti¨® en que Rauxa fue eliminada porque carec¨ªa de un documento empresarial que exige la ley que regula los contratos p¨²blicos.

La teniente de alcalde de IC, Eul¨¤lia Vintr¨®, sali¨® as¨ª al paso a las cr¨ªticas que tanto la oposici¨®n municipal como la entidad le dirigen cuestionando la sensibilidad social con que se ha llevado el caso. Para Vintr¨®, el Ayuntamiento se ha limitado a cumplir la legislaci¨®n vigente, seg¨²n la cual los t¨¦cnicos no tuvieron ocasi¨®n de evaluar la experiencia ni el hecho de que los empleados de Rauxa sean indigentes que han superado la adicci¨®n al alcohol. Vintr¨® manifest¨® que, en atenci¨®n a la labor realizada por esta organizaci¨®n, con la que el ¨¢rea de Servicios Sociales mantiene buenas relaciones, se ofrecieron distintas modalidades de empleo a la veintena de personas que prestaban sus servicios en el comedor del Clot, para impedir que fueran al paro. A su vez la presidenta de Rauxa, Maria Llu?sa Mar¨ªn, reconoci¨® que rechazaron tales ofertas entre otras cosas porque la nueva empresa adjudicataria, que deb¨ªa absorber una parte de la plantilla, les propuso contratos de 15 d¨ªas de duraci¨®n y a t¨ªtulo de prueba. El Ayuntamiento facilit¨® datos sobre las 4.864 personas que los servicios municipales de acogida atendieron entre 1993 y 1997, fin al que se destinaron 957 millones de pesetas. De esta forma la teniente de alcalde quiso aclarar que tambi¨¦n el Gobierno municipal trabaja para prestar ayuda al colectivo de indigentes con graves carencias. La responsable de Asuntos Sociales del Ayuntamiento expres¨® su preocupaci¨®n por la irrupci¨®n de grandes empresas sanitarias que empiezan a operar en el campo de la asistencia social. "No nos gustar¨ªa que llegara el momento en que estas empresas absorbieran a las peque?as", a?adi¨® Vintr¨® al hacer referencia a la reconversi¨®n que atraviesa la asistencia social. Vintr¨® manifest¨® su pesar por el hecho de que Rauxa quedara fuera del concurso por un mero incumplimiento legal. Menos condescendiente fue con la oposici¨®n municipal de CiU y del PP, a la que recrimin¨® que cometiera "una ligereza imperdonable" al no detectar ning¨²n error en el pliego de condiciones del concurso mientras que ahora, una vez adjudicado el servicio, acusa a los responsables de los servicios sociales de "falta de sensibilidad social y de tener una visi¨®n de bur¨®crata". La responsable de Asuntos Sociales dijo que, pese a la extra?eza que le ha causado el hecho de que Rauxa haya tardado m¨¢s de dos meses en plantear p¨²blicamente su desacuerdo con la adjudicaci¨®n, no ha variado su actitud. Vintr¨® ofreci¨® a la entidad un di¨¢logo que permita superar la actual situaci¨®n. Rauxa lleva 10 a?os atendiendo a indigentes de la ciudad que presentan serios problemas de dependencia del alcohol.