Hezbol¨¢ se infiltra en el Ej¨¦rcito israel¨ª

La guerrilla islamista Hezbol¨¢, que combate contra la ocupaci¨®n israel¨ª del sur de L¨ªbano, ha dado un gran salto cualitativo hacia la victoria. En su arsenal ha incluido la inform¨¢tica y una gran red de informaci¨®n que le est¨¢ permitiendo conocer los movimientos de las tropas enemigas con todo detalle. As¨ª lo afirman sus combatientes, plet¨®ricos tras el atentado que cost¨® la vida esta semana al general Erez Gerstein, n¨²mero uno del Ej¨¦rcito israel¨ª en la zona ocupada. En Israel, mientras, aumentan las voces contra la presencia de tropas en esta peque?a franja.

"Estamos ganando al Mossad". Los servicios secretos de la guerrilla islamista del Hezbol¨¢ (Partido de Dios) est¨¢n haciendo tambalear al Ej¨¦rcito de Israel, en el sur del L¨ªbano. Los agentes shi¨ªes han logrado infiltrarse entre los soldados hebreos consiguiendo informaci¨®n puntual y precisa de cada uno de sus movimientos, lo que les ha permitido en poco menos de una semana infligir importantes derrotas al enemigo, incluido el asesinato del general Erez Gerstein, n¨²mero uno del Ej¨¦rcito de ocupaci¨®n. El desaliento y la desmoralizaci¨®n han empezado a invadir a los soldados israel¨ªes, que empiezan a preguntarse en voz alta "qu¨¦ hacemos lejos de casa"."Nuestras ¨²ltimas victorias se han basado en la informaci¨®n facilitada por los servicios de inteligencia. Disponemos de datos puntuales de todos los movimientos de las tropas israel¨ªes sobre territorios ocupados. Somos capaces de distinguir cada uno de sus gestos, anticiparnos en algunos casos a sus decisiones. E incluso le dir¨¦ que conocemos sus t¨¦cnicas, sus estrategias y que disponemos asimismo de ant¨ªdotos y m¨¦todos para hacerles fracasar", afirma con contundencia Muifac Jemil, portavoz de la guerrilla shi¨ª, en la oficina que el movimiento Hezbol¨¢ posee en el populoso barrio de Haret Hereik, muy cerca del centro de Beirut.

La euforia de este joven combatiente, que apenas ha cumplido los treinta a?os, es el fruto de dos victorias consecutivas, alcanzadas en poco menos de una semana sobre el enemigo; la muerte de tres oficiales del Ej¨¦rcito de Israel cuando trataban de infiltrarse, al frente de un comando de 15 hombres, en el interior de L¨ªbano para llevar a cabo una operaci¨®n de castigo y la muerte de un general de brigada, Erez Gerstein, a las mismas puertas de su acuartelamiento en Marjayune, cuando regresaba con un convoy militar de dar el p¨¦same a los familiares de un soldado fallecido en combate.

Una hora de antelaci¨®n

El destacamento de la guerrilla islamista del Hezbol¨¢, al mando del comandante Karbala, conoci¨® el pasado 23 de febrero, con una hora de antelaci¨®n, la llegada al t¨¦rmino municipal de Mashgara, al norte de la zona ocupada, del comando de ¨¦lite del Ej¨¦rcito israel¨ª, que trataba de acercarse al interior del territorio controlado por las tropas libanesas, y m¨¢s al norte, sirias. Una hora de tiempo fue m¨¢s que suficiente para preparar la emboscada, coger al comando por sorpresa, provocar tres muertos, varios heridos y asegurarse a la vez la huida antes de que llegaran los refuerzos a bordo de los helic¨®pteros.Cinco d¨ªas m¨¢s tarde la guerrilla shi¨ª volvi¨® a tener informaci¨®n destacada sobre los movimientos del general israel¨ª Erez Gerstein, encargado de las tropas en el territorio ocupado, gracias a lo cual lograron con antelaci¨®n sembrar de minas la carretera que une el puesto de Marjayune con la localidad de Kawakba, haciendo explotar la carga con absoluta precisi¨®n sobre el segundo coche del convoy, un Mercedes blindado, en el que viajaba el militar, sus dos asistentes y un periodista local. La muerte del general fue anunciada de inmediato por la televisi¨®n local de Hezbol¨¢ con profusi¨®n de v¨ªdeos y fotos del general, demostrando as¨ª que se trataba de una operaci¨®n planificada desde hac¨ªa ya tiempo.

"Nuestra guerra no es ya una guerra de guerrillas. Es una guerra de cerebros, de inteligencia. Luchamos con los ordenadores en la mano, es decir, con todo tipo de material sofisticado, tanto como el que posee el Ej¨¦rcito israel¨ª. T¨¦cnicamente estamos al mismo nivel que ellos, lo que nos permite desactivar sus dispositivos o buscar material que inutilice todo tipo de artilugios", asegura el combatiente Muifac Jemil.

Puntos d¨¦biles

El portavoz del Hezbol¨¢ se muestra, sin embargo, herm¨¦tico en el momento de se?alar cu¨¢l es el tal¨®n de Aquiles del Ej¨¦rcito israel¨ª, que permite a los servicios de inteligencia shi¨ªes amasar informaci¨®n secreta. El portavoz de la formaci¨®n islamista asegura que el punto d¨¦bil de los enemigos est¨¢ en el miedo y en la falta de coraje: "Tienen mucho miedo y no saben c¨®mo responder". Las hip¨®tesis son otras. Las fugas de informaci¨®n podr¨ªan venir de la misma poblaci¨®n de los territorios ocupados, donde se ha urdido una verdadera red de confidentes, pero los datos m¨¢s importantes provienen del propio Ej¨¦rcito de Liberaci¨®n del Sur del L¨ªbano, un cuerpo de cerca de 2.000 soldados libaneses, al mando del general Antoine Lahd, que luchan desde 1982 al servicio de los israel¨ªes. Las fuerzas de Lahd, compuestas al principio por un 90% de soldados de religi¨®n cristiana, se han abierto en los ¨²ltimos a?os a las comunidades musulmanas.Todas estas victorias han empezado a provocar una oleada de desaliento entre las tropas israel¨ªes, compartido por un importante movimiento de protesta c¨ªvico contra la guerra de L¨ªbano. En esta situaci¨®n de debacle, hace pocos d¨ªas un coronel del Ej¨¦rcito israel¨ª protestaba contra los "padres llorones que echan abajo la moral de los soldados".