Educaci¨®n propone la asignatura de ¨¦tica como alternativa forzosa y evaluable a la religi¨®n

Los alumnos que no deseen recibir clase de religi¨®n deber¨¢n asistir forzosamente a la de ¨¦tica, una asignatura que quedar¨¢ equiparada en valor acad¨¦mico a la de religi¨®n: ser¨¢ evaluable, pero no computable para las becas y la selectividad. En consonancia con el terreno extremadamente delicado que pisa, el Ministerio de Educaci¨®n ha ido cambiando en los ¨²ltimos d¨ªas su proyecto de real decreto sobre ense?anza de la religi¨®n en infantil, primaria y secundaria. En la ¨²ltima versi¨®n se mantiene la pretensi¨®n de que la ¨¦tica sea evaluable, algo que el Supremo, en una sentencia dictada en enero de 1997, consider¨® una imposici¨®n inaceptable para quienes no desean dar clase de religi¨®n.

La religi¨®n es de oferta obligatoria en los centros, pero de elecci¨®n voluntaria para los alumnos. La asignatura es evaluable -es decir, los alumnos reciben una calificaci¨®n que se incluye en su expediente, pero no tiene peso en la nota media para la selectividad y las becas.La actual alternativa es obligatoria para quienes no quieran religi¨®n, pero no es evaluable. Consiste en un conjunto de 38 grupos de actividades, como Am¨¦rica Latina, asociaciones juveniles, audiciones musicales, biblioteca escolar, debates de actualidad, democracia paritaria, dramatizaciones, historia del cine, peri¨®dico mural, taller de radio, juegos deportivos, juegos l¨®gicos o juegos de mesa, actividad esta ¨²ltima que dio lugar a la famosa caricatura de "la alternativa del parch¨ªs", generosamente empleada por la ex ministra Esperanza Aguirre. Tambi¨¦n su sustituto la ha criticado, al decir que es "manifiestamente mejorable".

Lo que no est¨¢ claro es c¨®mo. La dificultad de llevar a buen puerto la iniciativa del Gobierno, que arranca de la ¨¦poca de Aguirre, queda demostrada por la acumulaci¨®n de borradores y las advertencias que sobre la provisionalidad del documento prodigaron ayer los responsables de Educaci¨®n.

Las fuertes presiones que el Gobierno ha recibido de la Iglesia, redobladas en los ¨²ltimos d¨ªas tras la renovaci¨®n de la Conferencia Episcopal, se ven abocadas a un margen de respuesta muy estrecho para el Ejecutivo, como consecuencia de cinco sentencias del Supremo.

Hasta ahora, en respuesta a las demandas de organizaciones civiles y religiosas, el alto tribunal ha establecido las siguientes directrices:

- La religi¨®n es evaluable, pero no computable para la nota media.

- La alternativa es obligatoria para quienes no elijan religi¨®n.

- La alternativa no puede incluir materias curriculares para no dar ventajas acad¨¦micas a quienes no elijan religi¨®n.

- La alternativa no puede ser evaluable por el hecho de que lo sea la religi¨®n.

Este ¨²ltimo punto es el m¨¢s relevante respecto a la propuesta del ministerio. La correspondiente sentencia del Supremo, con fecha del 31 de enero de 1997, dictamina que "no es razonable aceptar que quien desee valerse de una garant¨ªa constitucional de formaci¨®n religiosa, no obligada para quien no se acoja voluntariamente a ella, tenga un derecho constitucional a imponer que las condiciones pactadas para su prestaci¨®n en orden a la evaluaci¨®n se extiendan a actividades alternativas no cubiertas con dicha garant¨ªa".

Adem¨¢s, el Supremo considerar¨ªa una "carga desproporcionada para los alumnos no inscritos en la ense?anza religiosa que, adem¨¢s de ver intensificado su horario lectivo con las actividades alternativas, se les impusiera la evaluaci¨®n de las mismas".

En el documento ministerial, por el contrario, se afirma que no evaluar las ense?anzas alternativas "supone desatender claras exigencias pedag¨®gico-did¨¢cticas", constituye "un elemento de perturbaci¨®n en la organizaci¨®n y funcionamiento de los centros" y "distorsiona el concepto mismo de evaluaci¨®n acad¨¦mica".

Respecto a la necesidad de que la alternativa sea de ¨ªndole ¨¦tica, el Supremo afirma que "nadie est¨¢ legitimado por la Constituci¨®n para imponer a los dem¨¢s la ense?anza de cualesquiera otras religiones o sistemas morales".

Fuentes de Educaci¨®n precisaron ayer que la ¨²ltima versi¨®n del proyecto ha sido elaborada por el secretario de Estado de Educaci¨®n, Jorge Fern¨¢ndez D¨ªaz, y sus colaboradores, pero a¨²n no hab¨ªa sido elevada al ministro Mariano Rajoy. Con su ¨²ltimo borrador, el equipo de Rajoy ha dado marcha atr¨¢s respecto a otro del pasado 24 de febrero en el que, adem¨¢s de la implantaci¨®n de la ¨¦tica como asignatura alternativa a la religi¨®n, se establec¨ªa que las notas de ambas materias ten¨ªan valor para el promedio de la selectividad y las becas. Si la implantaci¨®n de la ¨¦tica es jur¨ªdicamente problem¨¢tica, seg¨²n la doctrina del Supremo, m¨¢s lo es el hecho de que sea evaluable, y mucho m¨¢s habr¨ªa sido que las notas contaran para la media.