La reuni¨®n de Par¨ªs se abre con la promesa de los kosovares de firmar el acuerdo de paz

Las negociaciones de paz sobre Kosovo reiniciadas en Par¨ªs se desbloquearon ayer parcialmente con el anuncio de la delegaci¨®n albanokosovar de que est¨¢ dispuesta a suscribir el acuerdo planteado por el Grupo de Contacto. Aunque el anuncio de esa disposici¨®n no es lo mismo que la firma efectiva del acuerdo —los albanokosovares ya mostraron ese mismo prop¨®sito hace tres semanas al t¨¦rmino de las conversaciones de Rambouillet—, la iniciativa permiti¨® a los promotores de la conferencia de paz volcar sus presiones sobre la parte serbia, que sigue rechazando la presencia militar internacional.

"Los dirigentes yugoslavos se encuentran ahora entre la espada y la pared", proclam¨® satisfecho el ministro franc¨¦s de Exteriores, Hubert V¨¦drine, tras conocer el escrito en el que la parte albanokosovar muestra su intenci¨®n un¨¢nime de firmar el acuerdo. "La delegaci¨®n serbia ha perdido su primera l¨ªnea de defensa, la luz verde de los kosovares deja a los serbios sin excusas y ahora tendr¨¢n que recuperar el tiempo perdido", manifest¨® a su vez el ministro brit¨¢nico de Exteriores, Robin Cook.

Por mucho que responda a una cuesti¨®n t¨¢ctica, en la convicci¨®n de que la parte serbia no aceptar¨¢ la presencia de la OTAN en Kosovo, la iniciativa albanokosovar da un giro formal, pero probablemente trascendental, a las conversaciones y prefigura un desenlace de bombardeos en el caso de que las autoridades yugoslavas persistan en sus trece.

Despu¨¦s de semanas de divisiones y contradicciones internas, s¨®lo difuminadas en los momentos claves de mayor presi¨®n, los albanokosovares parecen haber entendido que su supervivencia pol¨ªtica depende del abrigo que encuentren en la comunidad internacional-

Hashim Thaci, sobre el que pesa una orden de b¨²squeda y captura emitida por las autoridades de Belgrado, es el elemento que hace tres semanas en Rambouillet frustr¨® la firma albanokosovar del acuerdo de paz cuando todo estaba dispuesto para colocar al presidente yugoslavo Siobodan Milosevic ante el dilema de la firma o el bombardeo de sus bases militares.

"Identificar al culpable", Slobodan Milosevic, ante la comunidad internacional es un requisito imprescindible a la hora de recabar el apoyo de los pa¨ªses ante una eventual represalia de la, OTAN. Ayer mismo, al un¨ªsono, los ministros del Grupo de Contacto se aplicaron a esas tareas. El presidente de EE UU, Bill Clinton, se sum¨® expresamente a la ofensiva dial¨¦ctica indicando que si Milosevic sigue dando pruebas de intransigencia y de agresiones "nos dejar¨¢ pocas opciones". M¨¢s expl¨ªcito todav¨ªa, el secretario general, de la OTAN, Javier Solana, apunt¨®: "Me temo que la violencia persistir¨¢ en, Kosovo si no se firma el acuerdo y nosotros debemos estar preparados para interrumpir esa violencia".