Todo es Auschwitz

De ni?o, el personaje -?el autor?- vio una pel¨ªcula del Oeste, con los pieles rojas colgados de los pies, y su poblado incendiado: dese¨® ser piel roja. Conozco ese sentimiento. Conoc¨ª uno que cuando le¨ªa las aventuras de un burrito maltratado -no era el "de cristal" de Juan Ram¨®n Jim¨¦nez- quer¨ªa ser burro. Es un masoquismo social y cristiano y vagamente masoquista: se desea ser lo ¨²ltimo en este rango, para no ser el culpable, que es peor. Acepto la idea de que Miguel Morey es el protagonista intelectual, el hombre que, fuera de la aventura vital que se describe, est¨¢ dentro de ella en el pensamiento, y hace lo que puede por compartirla para enfrentarse desde dentro. Ve en todo Auschwitz. No cesa nunca. Como protagonista intelectual, escribi¨® su obra como ensayo, y gan¨® justamente el Premio Anagrama, que da Jorge Herralde. No era un ensayo conceptual, sino m¨¢s bien l¨ªrico: se defiende en ¨¦l la poes¨ªa y la palabra como liberadores, y se utilizan ampliamente. Sus adaptadores al teatro (el director, Pepe de Jim¨¦nez, que ha hecho la dramaturgia con el autor) han conservado bien el texto, que no se deb¨ªa perder: lo han dividido, troceado, dialogado y le han a?adido elementos de espect¨¢culo, andamiajes, figuras, acci¨®n; una simulaci¨®n, dicen, dentro de una representaci¨®n.Alg¨²n espectador dec¨ªa ayer que eso "no es teatro". Tengo mis dudas: teatro es todo lo que se representa en un escenario, aunque sea el Discurso del M¨¦todo. Puede ocurrir que el texto de un ensayo po¨¦tico no sea f¨¢cilmente comprensible: creo que ¨¦ste s¨ª lo es, si se pone atenci¨®n, y los actores lo van desgranando. No pareci¨® que despertara un gran entusiasmo en su estreno. Quiz¨¢ con un p¨²blico menos "teatral" pueda encontrar un ¨¢mbito mucho mejor.