El teatro atrae cada vez m¨¢s p¨²blico, pero los creadores hablan de vac¨ªo de contenido
Ayer se celebr¨® el D¨ªa Mundial del Teatro con euforia cuantitativa y preocupaci¨®n cualitativa
Las gentes de la escena celebraron ayer el D¨ªa Mundial del Teatro. En miles de salas de todo el mundo se dio lectura al mensaje internacional, que este a?o le ha correspondido escribir a Vigd¨ªs Finnbogad¨®ttir, ex presidenta de la Rep¨²blica de Islandia y directora de escena. Los responsables de pol¨ªticas teatrales en nuestro pa¨ªs transmiten machaconamente que cada vez hay m¨¢s espectadores, pero son muchos los profesionales, como Boadella, Marsillach, Flotats o Espert, que, frente a este ¨¦xito cuantitativo, muestran su preocupaci¨®n por la p¨¦rdida de la funci¨®n social y cultural del teatro.
La jornada de ayer se aprovech¨® por parte de los pol¨ªticos para entonar su reiterada cancioncilla, con el estribillo coreado por ciertos sectores de la profesi¨®n: "Espa?a va bien, el teatro va bien y el p¨²blico nos demuestra que lo hacemos bien pues cada vez acude m¨¢s a los teatros". El hecho es objetivamente cierto. El n¨²mero de espectadores ha ido en aumento en los ¨²ltimos a?os, fundamentalmente en ciudades como Madrid y Barcelona.Son esos mismos responsables de pol¨ªticas teatrales los que m¨¢s arriman el ascua a su sardina, arrog¨¢ndose un especial protagonismo a la hora de analizar este periodo de bonanza, aunque la mayor¨ªa de los profesionales habla de diversas causas confluyentes. En estos t¨¦rminos se expresa Jes¨²s Cimarro, secretario general de la Asociaci¨®n de Productores Teatrales, quien se?ala como elementos favorecedores el auge de los musicales, el apoyo de las instituciones y diversas medidas que facilitan el acceso a las salas como la venta de entradas por tel¨¦fono o en cajeros autom¨¢ticos.
El escritor, actor y director Adolfo Marsillach dijo hace no muchos a?os que el p¨²blico estaba volviendo a los teatros y vaticin¨® que acudir¨ªa cada vez m¨¢s. Entonces y hoy dice que la gente se termina cansando de espect¨¢culos enlatados y los exige en vivo: "Ahora bien, hay que saber cu¨¢les son los l¨ªmites del mercado, debemos preguntarnos qu¨¦ consume ese p¨²blico y ah¨ª me entran las dudas, porque la contemplaci¨®n de la cartelera madrile?a es, como m¨ªnimo, poco estimulante y esto no se puede despachar con n¨²meros".
Esa confluencia de situaciones dispares entre s¨ª es la que hace que profesionales como la actriz y directora Nuria Espert afirmen que la desigualdad lo marca todo: "Habr¨ªa que sentarse y matizar, porque seg¨²n qu¨¦ se analice las conclusiones pueden ser muy distintas, en cualquier caso yo no veo razones para estar especialmente euf¨®rica, ni tampoco mostrarme negativa". En t¨¦rminos similares se expresa Josep Maria Flotats, el m¨¢ximo representante de la situaci¨®n de bonanza esc¨¦nica, ya que el espect¨¢culo Arte, de Jasmina Reza, que dirige y protagoniza junto a Jos¨¦ Mar¨ªa Pou y Carlos Hip¨®lito ha colgado todos los d¨ªas, sin excepci¨®n, el deseado cartel de "no hay entradas"desde que se estren¨® a principios de temporada: "La diferencia de calidad es muy distinta de unos espect¨¢culos a otros, tanto en el sector privado como en el p¨²blico y, por lo general, la calidad no es precisamente lo que sobresale", dice este actor al que le paran admiradores por la calle para darle las gracias por haber puesto en pie un texto inteligente: "el p¨²blico sabe diferenciar y agradece un texto que provoque la reflexi¨®n, el debate, el di¨¢logo..., algo que a todo buen teatro se le debe exigir".
A otros profesionales les preocupa especialmente el sometimiento del teatro a las nuevas leyes del mercado. Jos¨¦ Monle¨®n, director de la Fundaci¨®n del Instituo Internacional del Teatro del Mediterr¨¢neo y director de la revista Primer Acto afirma que se est¨¢ avanzando en la tradici¨®n del teatro que s¨®lo pretende entretener, como el de los hermanos ?lvarez Quintero o el de Mu?oz Seca, y muy poco en el teatro del arte, el teatro como cultura, que aspira a profundizar en el mundo: "Adem¨¢s si el primero est¨¢ sujeto a las leyes del mercado no querr¨¢ asumir los riesgos de un teatro de la revelaci¨®n y del descubrimiento que da al individuo conciencia de su existencia". Situaci¨®n casi hilarante es la que provocan autores consolidados y prestigiados como Ferm¨ªn Cabal y Jos¨¦ Mar¨ªa Rodr¨ªguez M¨¦ndez que expresan opiniones totalmente dispares. Mientras Cabal dice que todo va bien, que se ha acabado la sequ¨ªa autoral y el siglo XXI se avecina con una buena situaci¨®n, su colega le mira con escepticismo y contesta: "Yo digo todo lo contrario, estamos en el peor momento que ha vivido el teatro, dominado por la tecnolog¨ªa y los extranjeros y los autores espa?oles que hay, muchos de ellos buenos, no llegan al escenario".
Tambi¨¦n los profesionales adscritos al movimiento de teatro alternativo, repartidos por m¨¢s de veinte salas por toda Espa?a y que agrupan a cientos de creadores no ocultan su cabreo y denuncian reiteradamente el abandono que sufren por parte de las administraciones que, seg¨²n ellos, dan la espalda al teatro que m¨¢s investiga y experimenta nuevos caminos esc¨¦nicos.
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.